¡Hola!
Cuando vi esta receta en el blog tu eres el chef, donde Bea hace unas cosas riquísimas, cuidando todos los detalles, con ese buen gusto con el que se nace, me dije: ésta es "la receta" y ni lerda ni perezosa me puse a hacerlos. Es una receta que nunca había cocinado, porque en Argentina no es habitual que los comamos, salvo que tengamos una abuela española que los haga y en mi caso no fue así. Y aunque hace más de once años que vivo en España, siempre los he comprado o me los han regalado. Pero este año me decidí a hacerlos. Quedaron riquísimos (creo que esta palabra es la que más uso cuando escribo los posts) y además son muy fáciles de hacer (y esta es la frase que más utilizo, ja, ja, ja)
Ingredientes:
400 gr. de harina
200 gr. de almendra molida
200 gr. de azúcar común
150 gr. de aceite (de girasol)
40 gr. de licor de naranja (Cointreau)
150 ml. de vino blanco dulce
1 cucharita de canela en polvo
1 cucharita de matalahuva (anís)
Piel de 1 limón
Ralladura de 1/2 limón
15 gr. de ajonjolí (sésamo) tostado
1 pizca de sal
Azúcar glas para rebozar
Colocar el aceite en una sartén y cuando esté caliente agregar la matalahuva o el anís en grano y la piel del limón. Retirar del fuego y dejar templar. Colar el aceite y reservar.
En otra sartén tostar las semillas de ajonjolí. Reservar.
En un bol mezclar la harina con la almendra molida, el azúcar, la canela, el ajonjolí, la ralladura de limón, la sal, el licor y el vino. Mezclar todo y añadir el aceite que habíamos reservado. Unir bien hasta obtener una masa que no se pegue a los dedos. Envolver con papel film y dejar reposar en la nevera durante 2 horas.
Precalentar el horno a 200º.
Colocar papel vegetal sobre una bandeja para horno. Reservar.
Estirar la masa en la encimera (mesada) enharinada, dejándola de 1 o 1,5 cm. de espesor. Cortar con forma de aros y colocar en la bandeja para horno.
Cocinar a 180º durante 15 minutos aproximadamente. Recuerden que cocino en un horno a gas, con calor sólo de abajo y en la rejilla central.
Retirar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla.
Una vez frío rebozar dos o tres veces con azúcar glas.
¡Hasta la próxima!
¡Sean felices!
Rosi.