Revista Cocina

Rosquillas de nata con canela y jengibre

Por Dolita
ROSQUILLAS NATA CON JENGIBRE Y CANELA 4
Bueno. Que lo mio no es nada de esto pero, una vez, ya que me salieron estupendas, pongo la receta para los" negados/nopuedoconlaresposteria" como yo.
Pues oye, que no me salieron mal. A mi gusto, no demasiado dulces. Lo suficiente para que incluso podamos meterlas en el cacao o el café.  
Si sois como yo. De esos que pensamos: "un poquito más de harina" ¡no¡ ¡que va¡ sólo lo justo. Paciencia y dejar reposar la masa 15 minutos :) Nomás. Las manos con pelín de aceite para manejarlas y sin problemas.
Formamos unas bolitas, meteis el dedo en el centro para formar la rosquilla y al aceite a temperatura moderada. Hacéis la prueba con una y es suficiente (como los crepés). Poquitas a la vez para controlarlas y de ahí al plato de la mezcla de azúcar y canela. Y ya¡
Olvidaba deciros que el tamaño de una nuez de masa es como una rosquilla normal. Suben muchísimo. Así que en la foto veréis "tamaño bocado" y "tamaño desayuno".
Ingredientes:
- 500 gr de harina
- 200 gr de nata para montar
- 2 huevos
- 150 gr de azúcar
- 1 sobre de levadura química
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- La piel de medio limón
- Ralladura de limón
- Jengibre fresco (o en polvo)
- Un poquito de sal
- Azúcar y canela para rebozarlas
- Aceite de girasol para freír
Elaboración:
Ponemos el aceite de girasol en una sartén y freímos la piel del limón. Retirar y dejar enfriar.
En un bol batimos la nata, el azúcar, los huevos, dos cucharadas del aceite anterior (cuando esté templado) y las ralladuras de limón y jengibre.
Cuando hayamos obtenido una crema homogénea, vamos añadiendo la harina, poco a poco, sin dejar de batir, terminando amasando con los dedos.
Si quedara muy pegajosa, añadimos un poco más de harina pero debemos procurar que no quede demasiado firme o nos quedarían duras al freírlas.
Pues sólo nos queda volver a calentar el aceite, a temperatura media, las freímos hasta que se doren y las vamos pasando a un plato con azúcar y canela.
Se pueden comer templadas y el resto conservarlas en un recipiente hermético. 
ROSQUILLAS NATA CON JENGIBRE Y CANELA 3

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog

Revistas