Revista Arte

¿sabías que los aviones no llevan tanques de oxígeno para las emergencias?

Por Insane Mclero @insanemclero

Cuando cogemos un vuelo, en todas las demostraciones de seguridad recibimos instrucciones, entre otras cosas, acerca de cómo colocarnos la mascarilla de oxígeno en caso de emergencia, que comienza con: “en caso de despresurización de la cabina, caerán automáticamente las máscaras de oxígeno de los compartimentos situados encima de sus cabezas”. Lo que seguramente nadie sabe es que los aviones no llevan reservas de oxígeno.

Entonces, ¿de qué sirven las mascarillas? ¿Cómo podremos respirar si hay problemas? La respuesta está en la química.

Los aviones incorporan los llamados generadores de oxígeno, como por ejemplo el peróxido de bario, molécula en la cual se encuentran dos átomos de oxígeno enlazados a uno de bario. Al quemarlo, éste libera oxígeno en forma de gas, y es de este modo como nos llega para que podamos respirar, aunque no sin antes pasar por un proceso de filtrado para que lo único que nos llegue sea el oxígeno. Mediante este mecanismo podemos llegar a respirar de 12 a 20 minutos, ya que es el tiempo que dura la combustión de este producto, el cual obviamente es limitado.

Y por qué utilizar este método en lugar de ir rellenando un tanque con oxígeno? Pues las principales razones son económicas y de espacio. El tamaño de un paquete de este producto no es mayor que el de una caja de pelotas de tenis. Comparándolo con el tamaño de un tanque de oxígeno, se ve claramente que esta es la opción preferible, además de mucho más barata.

Por cierto, además de para respirar en los aviones, este tipo de sustancias también se utilizan para los fuegos artificiales, ya que el oxígeno ayuda a producir combustiones con más facilidad.


Volver a la Portada de Logo Paperblog