Sabor agridulce en el debut en Champions

Comenzó la participación en Champions esta semana para Atlético de Madrid y Barcelona donde ambos cosecharon desigual fortuna.

Las madrileñas, vigentes campeonas de Liga, vieron como el sorteo les deparaba con un auténtico 'coco', el todopoderoso Wolfsburgo alemán, también vigente campeón, en este caso de la Liga alemana y que en su palmarés suma dos Champions. Pese a ser conscientes de que partían con cierta desventaja, sobretodo a nivel físico, las colchoneras no se rindieron antes del encuentro y ya sobre el césped se quitaron los miedos y miraron en todo momento a la cara al rival, llegando por momentos a ser dueñas del partido y sorprendiendo a nivel defensivo, para así desbaratar el peligro germano e intentar aprovechar las ocasiones para marcar.

Eso pudo haber ocurrido antes del descanso con un disparo de la goleadora Sonia o bien con un testarazo de Carmen Menayo que se marchó rozando el palo. La suerte, que ya había dado la espalda en el sorteo, lo volvía a hacer en el terreno de juego para acabar su 'jaque mate' con tres goles del Wolfsburgo. El primero, nada más comenzar la segunda mitad con un disparo ajustado de Harder. El segundo, de Silvia Meseguer en propia puerta y el tercero de Pajot en los compases finales.

Un resultado demasiado abultado para la buena imagen y trabajo realizado por las jugadoras de Ángel Villacampa y que ponen muy cuesta arriba poder continuar en esta Champions.

El Barcelona, con un pie en octavos

Si unas tuvieron cruz, otras tuvieron la cara. Las azulgrana vieron como el sorteo de Champions las emparejaba con el Avaldsnes noruego, un auténtico desconocido del que destacaban su potencial físico pero que el año pasado ya cayó en primera ronda ante el Olympique de Lyon. A los veinte minutos, una genialidad de Lieke Martens, marchándose de dos defensoras para acabar con un potente disparo al palo largo que servía para abrir el marcador en una lluviosa y fría tarde. Siendo dueñas de la posesión y del peligro, no lograban materializar las ocasiones que iban teniendo.

Fue en la segunda mitad, cuando Toni Duggan envió un balón al palo para a la segunda ocasión que tuvo, no perdonar. Una recuperación de Martens habilitó a Duggan que cruzó un disparo imposible para la portera haciendo el segundo. Pese a que sólo se está en el inicio de temporada, no hay que perder detalle de lo que puede ofrecer la dupla Martens-Duggan, que ya ha ofrecido grandes momentos.

Sólo cuatro minutos después, Andressa Alves hacía el tercero al aprovechar un rechace a tiro de Martens tras una buena combinación con Duggan. Y Mariona que había entrado hace poco al terreno de juego era la autora del cuarto y definitivo. Pudo haber reducido distancias el Avaldsnes, pero el remate de Pedersen se marchó rozando el palo.

Pese a no fiarse, con esta goleada y salvo descalabro en el Mini, el Barça tiene pie y medio en los octavos de la Champions.

At.MadridF.C.BarcelonaFútbol FemeninoUEFA Champions League 2017-2018

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