Hace tiempo publiqué la receta de gravlax de salmón (con ese toque de remolacha roja) y su origen. Pues bien, os quiero enseñar a preparar salmón marinado, un plato simple que da tanto juego en la cocina que no os podréis ni imaginar y os hará sentiros muy felices con vosotros mismo cuando probéis el resultado. Imaginaros cuando estén todos los comensales en la mesa esperando y llevéis un aperitivo de salmón marinado; todos dirán, que buena pinta tiene ese salmón y podréis decir con orgullo, pues lo he marinado yo. Seréis el perfecto anfitrión/a!!
Además de servirlo como entrante acompañado de verduras cortadas en daditos como pepino, tomate, apio... y salsa agria, con espárragos y mayonesa casera, o las clásicas tostas untadas de queso y unas lonchas de salmón por encima, también podréis incluirlo en ensaladas pero eso ya os lo enseñaré en otro artículo, ahora vamos a centrarnos en el señor salmón y su delicado y mágico marinado!!
Ingredientes:
1 cola de salmón, limpia de escamas, abierta por el medio y sin espinas
Sal marina y azúcar blanco (a partes iguales)
Un manojito de eneldo fresco, picado o 2 cuch. de eneldo seco
La ralladura de 1 limón
Aceite de oliva
Elaboración:
En un bol mezclamos la misma cantidad de azúcar que de sal (yo he puesto unas 7 cuch. grandes colmadas de ambos ingredientes, por si lo queréis tener en cuenta). Agregamos la ralladura de limón y el eneldo, removiendo para que todo mezcle.
Forramos una bandeja lo suficientemente grande para que quepan las piezas de salmón con papel film y esparcir una capa en el fondo de marinado del bol, colocando encima la pieza de pescado con la piel hacia arriba y cubriremos con otra capa del marinado, asegurando que todo queda bien cubierto. Ahora tapamos con el papel film formando un paquetito, y pondremos algo de peso sobre la bandeja para hacer un poco de presión y que la carne marine con mas facilidad, como por ejemplo un mortero u otra bandeja mas pequeña, una tabla de cortar... Dejamos en la parte de abajo de la nevera unas 24 horas aprox., es el tiempo que necesita esta cantidad que he utilizado, si son de la parte de delante de salmón y veis que el grosor es mayor, entonces tendréis que dejarlo un día y medio o dos días.
Pasado este tiempo observaremos que el salmón ha soltado bastante aceite y agua en el fondo de la bandeja, eso forma parte del proceso. Retiráis con cuidado el pescado y lavamos bajo el grifo para quitar todo el marinado, secando luego suavemente con papel de cocina para eliminar toda la humedad.
Con la piel hacia abajo, colocáis el pescado sobre la tabla de cortar y esparcir por encima con otro poco de eneldo picado, simplemente para dar un toque gustoso y aromático al salmón. Ayudándonos de un cuchillo jamonero de esos que tienen la hoja larga, cortamos lonchas lo mas finas posibles con la hoja ligeramente inclinada, por supuesto, teniendo cuidado de no cortaros!! Y servís como mas os guste; lo que sobre lo metéis en un recipiente con un poco de aceite de oliva para evitar que se reseque en demasía y a la nevera de nuevo. Aguantará unas 2 semanas aprox. aunque dudo mucho que dure tanto!!
Sugerencias: Es una receta es básica y a partir de aquí se pueden hacer cosas interesantes como sustituir el salmón por trucha u otro pescado graso, y en vez de usar eneldo, por excelencia la hierba aromática que combina a la perfección con el salmón, podréis marinarlo con tomillo, romero, orégano, bayas de enebro majadas... y cambiar el limón por ralladura de pomelo, lima o naranja.
Nota: Si os estáis preguntando ¿por qué uso la parte de la cola en vez de otras partes del salmón para esta receta? pues porque me gusta mucho usar este lado del pescado en ocasiones no muy valorado por la gente y creo que se le puede dar un buen trabajo en la cocina.