Revista Cultura y Ocio

Salome de Richard Strauss

Publicado el 22 mayo 2010 por Maac @Elblogdemaac


El 9 de diciembre de 1905 en la Semperoper de Dresde, cuando habían transcurrido cinco años de la muerte de Oscar Wilde, se estrenaba la ópera Salome de Richard Strauss. El bellísimo teatro, destruido durante unos bombardeos en 1945,y que será reinaugurado tras su reconstrucción en 1985, había sido testigo del estreno de óperas como Rienzi (1842), El holandés errante (1843) y Tannhäuser (1845) de papá Wagner, o Feuersnot (1901) del propio Strauss. Tras Salomé aún albergaría los estrenos de grandes obras de este compositor: Elektra (1909), Der Rosenkavalier (1911), Intermezzo (1924), Elena Egipciaca (1928), Arabella (1933), La mujer silenciosa (1935) y Daphne (1938); su escenario también fue testigo del estreno de Doktor Faust (1925) de Busoni y Cardillac (1926) de Hindemith.
Salome de Richard StraussSalomé, que es la tercera ópera de Richard Strauss tras Guntram (1891) y Feuersnot, supuso la consagración del compositor en cuanto operista, las dos óperas precedentes, que no conseguían despegarse de Wagner, no habían tenido éxito; sin embargo, a Strauss ya se le había reconocido su talento musical como director -había realizado giras que le habían llevado hasta Estados Unidos- y como compositor gracias a sus poemas sinfónicos (Don Juan, Muerte y Transfiguración, Así habló Zaratustra, Una Vida de héroe, Las travesuras de Till).
- LA TRAMA. HERODES ANTIPAS era hijo de Herodes el Grande -a su muerte en el año 4 a. C. se repartió su reino entre sus hijos- y vivía en concubinato con la viuda de su hermano Julio Herodes Filipo, tetrarca de Traconítide, para ello había repudiado a su esposa. En la ópera se mueve entre el deseo de su joven hijastra, hija de su hermano y Herodías, y el temor a las profecías de Jokanaan. Al final sucumbirá, contra su voluntad, a los caprichos de SALOMÉ, personaje en el que se centra la obra. HERODÍAS,la madre de Salomé, está cegada por el ansia de poder pero, a la vez, es fría y calculadora. Odia a JOKANAAN, profeta que se dedica a proclamar la llegada del Mesías y a denunciar la relación entre Herodes y Herodías por ir contra los dictados de la ley de Moisés. NARRABOTH, un joven capitán de guardia, será la primera víctima de la atracción que despierta Salomé.
Salome de Richard Strauss- EL LIBRETO. Salomé está basada, de manera bastante fiel, en el drama homónimo de Wilde, escrito en origen en francés a partir de los textos de los Evangelios según San Marcos (6, 21-28) y San Mateo (14, 6-11) que narran brevemente un episodio de la historia entre Salomé y Juan el Bautista durante el reinado del tetrarca Herodes Antipas. Wilde modifica la historia y minimiza la influencia de Herodias en la muerte del Bautista, será la Salomé despechada la que exigirá por su propia voluntad la cabeza del loco visionario.
OSCAR WILDE escribió su Salomé en un ambiente fin de siglo en el que se dan la mano lo simbolista y lo decadente, no fue el primero en interesarse en este tema, ni siquiera el primero en tener la idea de que la cabeza del Bautista, desprendida del cuerpo, fuera besada por una mujer. La obra teatral, traducida al inglés, iba a ser estrenada por Sarah Bernhardt en Londres en 1892, pero no fue posible porque las autoridades alegaron que no era posible representar escenas bíblicas. Se estrenó finalmente en París en 1896, la protagonista fue encarnada por la actriz Lugné Poé. En Alemania se estrenó en 1901 en Breslau. Poco después, en Berlín, la vería representada Strauss.
Para la versión en alemán Richard Strauss recurrió a la traducción realizada por Hedwig Lachmann realizandole algunos retoques. Uno de los logros de Richard Strauss, siguiendo la obra de Wilde, es hacer transcurrir la acción sin solución de continuidad en un único acto, insertando entre sus cuatro escenas tres interludios orquestales que contrastan con el inicio de la opera, carente de obertura o preludio. A mediados de junio de 1905 la ópera estaba terminada, Richard Strauss tenía 41 años y, tras el fracaso o la indiferencia de Guntram y Feuersnot, se jugaba mucho como compositor de ópera.
Salome de Richard Strauss
El Semperoper de Dresde en 1900
- EL ESTRENO de la ópera tuvo lugar en Dresde, el 9 de diciembre de 1905, asistieron personalidades como Rachmaninov o Toscanini, fue un éxito pero, como el drama original de Wilde, también suscitó reacciones adversas: El Emperador Guillermo II la desaprobó y sólo terminó autorizando su representación con la condición de que en el momento de la muerte de Salomé apareciera la estrella de Belén, la Ópera de Viena se negó a representarla "por razones religiosas y morales", la cantante encargada de estrenar el papel principal, Marie Wittich, se negó al principio pronunciar determinadas frases que consideraba obscenas, en Nueva York fue tal el escándalo que no hubo más representaciones que la del estreno.
Strauss llegó a utilizar el texto original en francés para ser estrenada en París dos años después de su estreno en Dresde en 1905, para adaptar la música a la prosodia francesa tuvo que realizar modificaciones en las líneas vocales -esta versión en francés fue grabada por Kent Nagano-. Sin embargo la versión en francés que finalmente se estrenó en París no fue la de Richard Strauss, que se estrenó en Bruselas en 1907, sino que se utilizó la adaptación de Jean de Marliave, y lo fue en 1910 porque en 1907 en el Teatro de los Campos Elíseos lo que se ofreció fue la Salomé original en alemán.
- MUSICALMENTE está basada en principios wagnerianos: una textura musical continua -la inclusión de la danza está más que justificada dramáticamente, hasta el punto de que sin ella todo carece de sentido-, el uso del sprechgesang y leitmotives; sin embargo, renuncia al desarrollo de cada motivo a la manera de Wagner, renunciando también a la introducción de recitativos largos que dilaten la acción musical en detrimento de la teatralidad. El número de instrumentistas que intervienen en cada representación es impresionante, más de 100, esto da una idea de la capacidad para la orquestación que poseía el compositor, capacidad que ya había demostrado en sus poemas sinfónicos.
- LA ATRACCIÓN DEL PECADO. En Salomé el espectador descubre que el pecado puede generar un misterioso atractivo. Se respira un ambiente oriental, nocturno y asfixiante, no hay personaje simpático, todos tienen algo que nos horroriza y algo que nos fascina o nos intriga, dándose cita temáticas y sentimientos contradictorios -la inmoralidad como fuente de belleza- que tienen que ver mucho con el nacimiento del expresionismo y el auge del psicoanálisis: el deseo, el miedo, la histeria, la necrofilia, el éxtasis, el hastío, la repelencia, el poder, la venganza, la crueldad, la atracción, el sadismo, el amor, la muerte, el placer, la castidad, el desenfreno sexual, la espiritualidad, la sumisión, el pecado, la lujuria, el placer... Pero el tema central sobre el que versa Salomé es el de la mujer como objeto y sujeto de deseo, que atrae a sus víctimas y las devora, la mujer fatal, llamada "mantis religiosa", que absorve al hombre anulándolo hasta que no es más que un desecho, y cuando éste se le resiste, como Jokanaan, no duda en sacrificarlo con el fin de ver satisfechas sus pretensiones. Por primera vez en la ópera -o por segunda, que tengo mis dudas respecto a Carmen- la pareja Wilde-Strauss nos presentan a una mujer que convierte al hombre en objeto de deseo y se comporta sexualmente como en la época se pensaba que sólo podían hacerlo los hombres. En un segundo plano y para perfilar mejor la figura de la protagonista aparece el tema de la moralidad y la vida solitaria y ascética de su principal víctima, Jokanaan, personaje austero y sagrado que transmite un mensaje talibanista de amor en el que cabe mucho odio. El profeta no le caía muy simpático a Strauss, no cabe la menor duda.
Pero Salomé es una obra tan rica que permite muchísimas lecturas, como la que la ve como un drama familiar en el que Salomé sería una niña caprichosa, infeliz y necesitada de cariño, forzada a convivir con su padrastro, Herodes, que siente un amor bastante sospechoso, Salomé se vengará de él consiguiendo la cabeza del profeta, algo que a Herodes políticamente no le conviene, a la vez también se vengará de su madre al besar la boca del hombre que la maldecía. La pregunta que me hago es la siguiente: ¿Qué significado tiene la muerte de la protagonista al final? ¿Es un castigo por sus pecados? ¿contiene la ópera un mensaje moralista?
Hoy escucharemos los tres interludios sinfónicos:


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