Actualmente existen diversas variaciones de la salsa allada incluyendo el uso de vinagres, miga de pan, laurel o cebolleas entre otros ingredientes. A continuación, vamos a explicar su técnica más básica, la más tradicional que a su vez, es la más común en Galicia.
La allada o ajada, es una salsa muy sencilla y rápida de realizar que podemos incorporar directamente a nuestros platos o bien servirla en una salsera a parte para que cada comensal aliñe sus platos a su gusto.
¿Qué ingredientes necesitamos para la allada o ajada?
Muy sencillo, sólo necesitamos:
- Aceite de oliva
- Dientes de ajo
- Pimentón El Ángel
¿Cómo se hace una salsa allada o ajada?
Pela los dientes de ajo que vayas a utilizar y córtalos en laminitas.
Echa un chorretón de aceite en una sartén a fuego lento y añade los ajos laminados. Fríe los ajos hasta que comiencen a dorarse, retira la sartén del fuego y añade pimentón al gusto.Con la propia temperatura del aceite, el pimentón se irá tostando lentamente de forma que proporcionará todo su aroma y sabor.Ahora tienes dos opciones en función de si te gusta o no encontrarte "los posos" del pimentón en el plato:- Si no te importa, puedes incorporar tal cual la salsa de allada a tus platos.
- En cambio, si no quieres encontrarte "posos" de pimentón y/o los trocitos de ajo debes dejar reposar la salsa aproximadamente 24 horas. El hecho de dejarla reposar, es con el fin de que el pimentón se vaya hacia el fondo, y nos quede una ajada limpia