Revista Cocina
Vinícola Aliança; Santa Colina, Estilo; Chardonnay 2009; 13% Grad. Alc; Paralelo 31°, Santana do Livramento, Rio Grande do Sul, Brasil.
Allá, bien al sur de este enorme país, en la frontera con Uruguay, está ubicado el municipio de Santana do Livramento, irónicamente a una distancia más cercana a la capital de su vecino (Montevideo) que a la capital de su propio estado, Porto Alegre. Y es quizá esta cercanía que hace de los viñedos de esta casa reciban las bondades del clima, muy diferente del típico ambiente tropical que caracteriza al Brasil.
Resaltan en la etiqueta lo del “Paralelo 31”, queriendo resaltar sobre aquella máxima que indica que las zonas apropiadas para el cultivo de las diversas uvas se dan, en el hemisferio norte entre el paralelo 30º y 50º, y en el hemisferio sur entre los paralelos 30º y 40º. Esto es algo así como una ley, lo más recomendable, aunque aquí en Brasil ya producen vino aquí en el Paraná y en Pernambuco, este último lugar bien al norte del país, fuera de estos límites; y Perú en su totalidad está también fuera de esas zonas y se produce vino hace mucho tiempo; México también produce vino hace mucho y creo que también tienen zonas más al sur del Paralelo 30º Norte. Sobre esto hay mucho por abordar, sólo quería aclarar a qué se refería con eso del “Paralelo 31º” en la contra-etiqueta.
Este vino es una gran sorpresa. Nunca antes lo habíamos visto, y debo confesar que lo que atrajo la atención fue el diseño de la xilografía que adorna la etiqueta. A diferencia de un libro, en donde hacerse de uno por la portada no es lo más recomendable, en un vino me atrae la idea de mezclar dos artes: la pintura (en este caso una xilografía), y el vino.
En Brasil esto no es una novedad: una de las líneas de la Vinícola Salton lleva el nombre del pintor ítalo-brasileño Alfredo Volpi: la línea de vinos Salton Volpi, cuyas diversas pinturas conforman la etiqueta de la gama de vinos en dicha línea.
Aquí son obras de cuatro diferentes artistas para las cuatro cepas que conforman la línea Estilo de Santa Colina, todos al parecer artistas del mismo estado al que pertenece esta bodega: Rio Grande do Sul; bacán la iniciativa.
Así, la obra “Abajour”, donde una pareja de amantes están envueltos bajo una tenue luz, de la artista plástica Arlete Cousandier Santarosa (Bento Gonçalves, Rio Grande do Sul, 1945) engalana las botellas del chadornnay de esta casa.
El vino: como dije al principio, sorprendió. Es de un amarillo concentrado, con burbujas pequeñitas que se ubican en la base de la copa, de tenues lágrimas, parece tener mediana corpulencia. Nariz: inicialmente es muy oloroso, a piña, manzanas verdes, aroma cítrico, muy agradable. Ya en la segunda copa no hay esa explosión aromática del inicio. Boca: es afrutado, piña, lima, manzana verde de nuevo, es cítrico, refrescante, de una agradable acidez, y un leve toque de amargor al final. Lo impresionante es el precio: RS 14,80, con una excelente relación precio calidad.
Una muy agradable sorpresa.