Revista Baloncesto

Scott Brooks, mejor entrenador del año

Publicado el 22 abril 2010 por Héctor
Scott Brooks, mejor entrenador del año(Foto: Gregory Shamus/NBAE/Getty Images)
Quién le iba a decir a ese frágil jugador rubio que oficiaba como tercer base en los minutos de la basura de los Houston Rockets campeones de 1994 que, más de tres lustros después, la NBA le iba a elegir como mejor entrenador de la temporada.
La carrera de Scott Brooks (44 años) nunca ha sido fácil. Se graduó en 1987 en la universidad de California en Irvine, después de haber pasado por otras dos universidades menores (San Joaquin Delta College y Texas Christian). Ningún equipo de la NBA se fijó en él, un base que apenas llegaba al 1.80 de estatura y con un físico bastante limitado. Por eso tuvo que probar suerte en las ligas menores, como la WBL o la CBA. En esta competición entró con buen pie, jugando para los Albany Patroons que se proclamarían campeones en 1988, mientras que Brooks fue incluido en el mejor quinteto de novatos.
Después de algunos meses jugando para los Fresno Flames de la WBL, Brooks tuvo su primera oportunidad en la NBA de la mano de los Philadelphia 76ers en la temporada 1988-89, en la que jugó todos los partidos como base suplente de Maurice Cheeks. Este sería el rol que asumiría durante toda su carrera -sólo fue titular en 7 de los 680 partidos que disputó en la NBA-, en equipos como Minnesota, Houston, Dallas, New York o Cleveland, de donde se retiró en 1998. En los Rockets conoció la gloria, siendo partícipe -casi testimonial- del primer Anillo de la historia de la franquicia.
Una vez retirado empezó su carrera en los banquillos, primero como entrenador de la modesta universidad de Southern California (2001-02) y después como asistente de equipos NBA como Sacramento Kings o Denver Nuggets. La temporada pasada, la destitución de P.J. Carlesimo le abrió las puertas del banquillo de los Oklahoma City Thunder, una franquicia en plena reconstrucción después de instalarse en su nueva ciudad tras varias (y exitosas) décadas en Seattle. Su primera temporada no fue nada del otro mundo (22 victorias y 47 derrotas), pero todo cambió en el verano de 2009.
Esta temporada, Brooks ha sido por primera vez head coach desde el inicio, y ha podido imprimir en su equipo el estilo de juego que tanto éxito le ha otorgado. Con una plantilla insultantemente joven y con un brillante futuro por delante, el principal mérito de Brooks ha sido la enorme mejora en el apartado defensivo. Con tanto talento en pista, la capacidad de anotación se les supone, pero lo que realmente ha marcado la diferencia ha sido el incremento de la capacidad defensiva del equipo, que ha pasado de encajar más de 109 puntos por partido a recibir menos de 105. Por supuesto, esto ha redundado en la marcha de la franquicia, el auténtico equipo revelación de la temporada. De 23 victorias se ha pasado a 50, y el equipo se ha metido en los Playoffs mucho antes de lo esperado.
Con estas credenciales, no sorprende que Scott Brooks haya sido elegido Mejor Entrenador de la temporada 2009-10, por delante de Scott Skiles y Nate McMillan. Los Thunder son el equipo más mejorado de la temporada, y tienen en Kevin Durant a una superestrella para muchos años. 

Volver a la Portada de Logo Paperblog