Bajo los auspicios del Consejo de
Seguridad de las Naciones Unidas, con el presidente Obama presidiendo la sesión
del Consejo, los Estados Unidos han hecho un llamamiento a la comunidad
internacional a adoptar medidas enérgicas, a nivel nacional e internacional,
para reducir el reclutamiento de combatientes del Estado Islámico.
Lo que no se menciona en los
informes de los medios es que los jefes de Estado y jefes de gobierno que han
respaldado la campaña de Estados Unidos contra el Estado islámico, aconsejado
por sus respectivos servicios de inteligencia, son plenamente conscientes de
que la inteligencia estadounidense es el arquitecto del Estado islámico y las entidades
de Al Qaeda relacionadas. Los países están obligados, ya sea en apoyo a la
resolución patrocinada por Estados Unidos o porque son cómplices de la agenda
de terror estadounidense.
Para que no olvidemos, Arabia
Saudita, Qatar, han estado financiando y entrenando a los terroristas del ISIS
en nombre de los Estados Unidos. Israel ha estado albergando
el Estado Islámico (ISIS) en los Altos del Golán, la OTAN en coordinación
con el alto mando turco ha estado
involucrado en la coordinación de la contratación de los combatientes
yihadistas enviados a Siria desde Marzo 2011. Por otra parte, las
brigadas de ISIS en Siria e Irak están integradas por fuerzas especiales
occidentales y asesores militares. Todo
esto es conocido y documentado, sin embargo, ni un solo jefe de Estado o Jefe
de Gobierno ha tenido el valor de señalar lo absurda de la resolución del
Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas patrocinada por los EE.UU, que fue
aprobada por unanimidad el 24 de septiembre. "Absurdo" es muy corto. Lo
que estamos presenciando es una empresa criminal bajo auspicios de la ONU.
La resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas insta a los
Estados miembros a "suprimir el reclutamiento, organización, transporte,
equipamiento" y la financiación de los combatientes terroristas
extranjeros". Específicamente, los puntos de resolución van dirigidos a
la "necesidad especial y urgente para implementar esta
resolución con respecto a esos combatientes terroristas extranjeros que están
asociados con ISIL [Estado Islámico de Irak y el Levante], ANF [Al-Nusrah] y
otras células, afiliados, grupos disidentes o derivados de Al-Qaida ... Pero, ¿estos no son precisamente la" oposición que
luchaba por la libertad", entrenados y reclutados por la alianza militar
occidental en su búsqueda para derrocar al gobierno de Bashar Al Assad?
Turquía y Jordania tienen
fronteras con Siria. Arabia Saudita y Turquía tienen fronteras con Irak. La
participación militar directa de estos países apunta a un escenario de escalada
y de guerra sectaria que se extiende desde el Mediterráneo hasta Asia Central. En
este sentido, Turquía ya ha anunciado que estará involucrado en las operaciones
terrestres dentro de Siria e Irak. El recién elegido primer ministro Ahmet
Davutoglu anunció (un día antes de la reunión del Consejo de Seguridad de la
ONU) que su gobierno buscará la aprobación del Parlamento turco para intervenir
militarmente en Irak y Siria.
Hurriyet, en su artículo del
Daily News titulado “Turkey’stop soldier inspects troops on Syrian border as gov't signals joining anti-ISILbid” indica que Turquía se prepara para unirse a los ataques unilaterales
ilegales en Siria encabezados por los EE.UU. y el respaldo de varias
autocracias del Golfo Pérsico:
Comandante de
las fuerzas terrestres de Turquía inspeccionó las tropas a lo largo de la
frontera con Siria el 24 de septiembre, ya que el gobierno turco señaló un
cambio de política en unirse activamente a la coalición internacional liderada
por Estados Unidos contra la amenaza yihadista en Irak y Siria.
El comandante
de las fuerzas de tierra de las Fuerzas,
Gen. Hulusi Akar visitó las instalaciones y tropas militares turcas desplegadas
a lo largo de la frontera con Siria, donde fue informado por los oficiales en
el campo.
También hay
informes de que el ejército ha intensificado su movilidad militar en la región
después de que el Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL) atacaran a los
kurdos sirios en la región fronteriza con Turquía, Kobane.
Turquía, en particular, ha servido como un refugio seguro para los terroristas de ISISdurante los últimos 3-4 años . De hecho, los mapas que muestran el
territorio de ISIS a través de los medios de comunicación occidentales se
aprecian claramente los pasillos que conducen directamente desde el territorio. Los milesde millones en dinero en efectivo, armas, equipos, e incluso los vehículos
usados para construir lo que ahora es una fuerza mercenaria ha servido para impugnar
el poder de forma simultánea en tres países - Líbano, Siria e Irak - fueron
proporcionados a los terroristas por países como Arabia Saudita y Qatar canalizados por agentes de la CIA que operan a
lo largo de la frontera de Turquía con Siria.
A pesar del juego retórico del
cambio de nombre a esta fuerza mercenaria para confundir a un público
inconsciente, no hay otra explicación que de cuenta de la magnitud de las
operaciones de ISIS, y es la concertada tutela multinacional.
La planificación de la ocupación
de Siria por parte de Turquía es una conspiración documentada.
El tallado del territorio sirio y la creación de “zonas de
Amortiguación[1]” ha sido parte de la agenda de los Estados Unidos
desde hace años – mucho antes de que la amenaza de ISIS se esgrimiera como
pretexto potencial para dirigir la intervención militar estadounidense. ISIS es
simplemente la última construcción que se utiliza para implementar esta
estrategia.
[1] Con
ataques aéreos estadounidenses se labra un vacío que pronto puede ser llenado
por extremistas que, presumiblemente no serán repelidos por el Ejército Árabe
Sirio forzados a retroceder en temor a provocar una nueva agresión occidental;
la situación evolucionará, sin duda, a un
"deterioro". Así como Turquía organizó operaciones de bandera
falsa en su frontera el año pasado en un intento de provocar una guerra con
Siria directamente mediante el apoyo a los terroristas creando, ya de por sí una
catástrofe humanitaria, ahora el vacío que está creando los EE.UU., intencionalmente,
pretende llenarlo de mercenarios terroristas y fuerzas de la OTAN para protegerlos
para que avancen cada vez más hacia
Damasco. Esa es la forma de una "zona de amortiguación".
Si bien la idea de una zona de
amortiguamiento tiene la intención de parecerse como el último intento honesto
para resolver una creciente crisis regional y para "ganar" la guerra
en Siria, en realidad esto ha sido planeado por lo menos desde marzo de 2012,
donde la idea fue propuesta por la fundación corporativa-financiera Brookings
Institution en su "Oriente Medio Memo # 21" "Evaluación de Opciones de cambio de régimen "en el que expresamente se
dice (el subrayado en negro es mío):
"Una alternativa es que
los esfuerzos diplomáticos para centrarse primero en la forma de poner fin a la
violencia y la forma de obtener acceso humanitario, como se está
haciendo bajo el liderazgo de Annan . Esto puede
conducir a la creación de refugios seguros y corredores humanitarios ,
lo que tiene que ser respaldad por un poder militar limitado. Esto, por
supuesto, está a la altura de los objetivos estadounidenses para Siria y podría
preservar a Asad en el poder. Desde ese punto de partida, sin
embargo, es posible que una amplia coalición bajo mandato internacional
apropiado podría añadir nuevas medidas coercitivas a sus esfuerzos ".
Brookings continúa describiendo
cómo alineación de grandes cantidades de tropas y armas por Turquía a lo largo
de su frontera en coordinación con los esfuerzos israelíes en el sur de Siria,
podría ayudar a efectuar el cambio violento de régimen en Siria (el subrayado
en negro es mío):
Además, los servicios de
inteligencia de Israel tienen un gran conocimiento de Siria, así como los activos
dentro del régimen sirio que podría ser utilizado para subvertir la base de
poder del régimen y presionar para la eliminación de Asad. Israel podría posicionar
fuerzas sobre o cerca de los Altos del Golán y, al hacerlo, podría desviar las
fuerzas del régimen suprimiendo la oposición. Esta postura puede conjurar
los temores en el régimen de Asad de una guerra de varios frentes, sobre todo
si Turquía está dispuesta a hacer lo mismo en su frontera y si la oposición
siria fuera alimentada con una dieta constante de armas y entrenamiento. Tal
movilización tal vez podría persuadir al liderazgo militar de Siria para
derrocar a Asad con el fin de preservarse a sí mismo. Sus defensores
argumentan que esta presión adicional podría inclinar la balanza en contra de Asad
en Siria, si otras fuerzas estubieran alineados correctamente.
El diario turco Sabah de Turquía informaba en
un artículo titulado: “Elejército turco será autorizado para entrar en Iraq y en Siria, según Davutoglu”:
El gobierno turco pedirá la
autorización del Parlamento para las operaciones militares en Siria e Irak,
dijo el recién electo premier Ahmet Davutoglu, en una conferencia de prensa el
martes.
Fuente