¿Se puede ofrecer el servicio de teleasistencia a personas con problemas de comunicación oral?

Esta es una pregunta fundamental para un país como el nuestro que cuenta con un porcentaje de personas mayores muy importante, la mayoría de las cuales,además, tiene problemas importantes de comunicación oral. De hecho, según varias empresas del sector sociosanitario la edad media de los usuarios del servicio de teleasistencia es de 77 años. El 68% de estos usuarios padece un déficit auditivo severo y un 32% tiene problemas en el habla.

Por eso las empresas prestadoras del servicio llevan años intentando mejorar su oferta para personas con dificultades auditivas, facilitando así la completa integración de estos usuarios en el sistema de teleasistencia. En este objetivo se ven acompañados por las empresas suministradoras de tecnología, que en algunos casos han desarrollado productos específicos para este colectivo de personas.

En la actualidad existen en el mercado varias posibilidades de terminales de teleasistencia que permiten al usuario comunicarse con la plataforma de emergencias con unas series de preguntas y respuestas predefinidas que aparecerán en la pantalla del terminal en caso de que se lance una alarma. De este modo, una vez enviada la alarma, el dispositivo permite al usuario seleccionar el tipo de alarma que desea enviar (‘Ayuda’, ‘Caída’ o ‘Recursos’) y una vez seleccionada la opción, se iniciará un dialogo de preguntas con la central de alarma que permitirá al servicio de teleasistencia movilizar los servicios necesarios para cada emergencia, a la vez que tranquiliza al usuario con mensajes del tipo 'Un médico está en camino'.
Este tipo de dispositivos cubren el total de las necesidades del servicio de teleasistencia como son las de comunicaciones de emergencia, sociales o de seguimiento en igualdad de condiciones que los dispositivos tradicionales.