Revista Cine
Se le conoce por haber dado vida a algunos de los mejores rancheros, comisarios, jefes de policía, militares, jueces, y políticos del Hollywood clásico. John McIntire hizo de la actuación su profesión en la década de los 40 y con la profunda voz que acreditaba y una estampa física marcada por el rostro enjuto y curtido, además de una mirada de acero, consiguió construir una larga carrera como uno de los grandes actores de reparto de la historia.
Nacido en Spokane (Washington), tuvo la posibilidad de conocer las duras condiciones de la vida rural. Creció en Montana donde aprendió el oficio de ranchero en la granja familiar. Quizá la autenticidad que le caracterizó en sus constantes intervenciones en el género del western fue forjada a lo largo de esos años.
La potencia y fuerza natural de su voz le permitió entrar a trabajar en la radio donde protagonizó varios seriales después de graduarse en la University of Southern California (USC).
En 1948 debutó en el cine con un pequeño papel en el clásico de cine negro, Yo Creo en Ti (Call Northside 777). El film estaba protagonizado por James Stewart, Lee J. Cobb, y Richard Conte. McIntire casi nunca estuvo al frente de los carteles pero su instinto interpretativo natural y la prestancia que fue ganando con el tiempo, le granjeó el reconocimiento de los estudios. Él siempre fue el secundario con el que gran parte de la audiencia adulta podía identificarse, incluso cuando hacía de villano. Así fue como empezó una extensa trayectoria interviniendo en más de 65 películas y 70 series de televisión (en apariciones regulares o puntuales) a lo largo de 40 años.
Todos los grandes intérpretes protagonistas tuvieron a McIntire al lado en algún momento y algunos como James Stewart o Henry Fonda también le hicieron frente puesto que el director Anthony Mann decidió aprovechar su consabida versatilidad para convertirle en un más que interesante villano. Este fue el caso de Winchester 73 (1950), Tierras Lejanas (The Far Country, 1954), y Cazador de Forajidos (The Tin Star, 1957). Otros westerns importantes en los que participó son Caravana de Mujeres (Westward the Women, 1951), Historia de un Condenado (The Lawless Breed, 1953), Apache (1954), The Kentuckian (dirigida por Burt Lancaster en 1955), El Sexto Fugitivo (Backlash, 1956), Dos Cabalgan Juntos (Two Rode Together, 1961), Noche de Titanes (Rough Night in Jericho, 1967), y El Rifle y la Biblia (Rooster Cogburn, 1975).
Aunque sus intervenciones más recordadas se dieran en el western, no hay que olvidar que McIntire también participó en otras grandes películas de muy diversos géneros: Sublime decisión (Command Decision, 1948), La Jungla de Asfalto (The Asphalt Jungle, 1950), The World in his Arms (1952), The Mississippi Gambler (1953), A Lion is in the Streets (1954), Psicosis (Psycho, 1960), El Fuego y la Palabra (Elmer Gantry, 1960), o Summer and Smoke (1961), entre otras.
A mediados de los 50, con la aparición de la televisión en el panorama mediático norteamericano, muchos actores de reparto empezaron a encontrar una nueva opción de trabajo que podrían aprovechar durante los periodos en que no tuvieran proyectos cinematográficos. McIntire fue uno de los intérpretes que se volcó en el nuevo medio iniciando una carrera paralela en la pequeña pantalla que le mantuvo ocupado hasta el fin de sus días.
Sus participaciones más prolongadas se dieron en Naked City, Caravana (The Wagon Train) -donde sustituyó a Ward Bond tras el fallecimiento de éste- y El Virginiano. Además realizó apariciones puntuales en clásicos como Alfred Hitchcock Presenta, La Dimensión Desconocida (The Twilight Zone), Zane Grey, Los Intocables, El Fugitivo, y Bonanza. En los 70 y 80 apareció en Los Ángeles de Charlie, Dallas, The Incredible Hulk, Hotel, La Rosa Amarilla, Arnold, Vacaciones en el Mar, y St. Elsewhere.
En sucesivos artículos, tendremos la oportunidad de seguir las carreras de otros grandes secundarios que, al igual que John McIntire, engrandecieron al cine con sus interpretaciones apoyando o siendo el contrapeso de las grandes estrellas protagonistas.
En mi caso, debo admitir que el papel de McIntire que recuerdo con más fuerza es el villano que dio vida en The Far Country. En el rol de Gannon, el autoinvestido juez de Skagway (Alaska), fue capaz de construir un pérfido personaje entregado a la causa de atormentar a Jeff Webster (James Stewart). Esta película cuenta también con la presencia del mítico Walter Brennan, otro de los actores de reparto que tendrá su artículo próximamente. Os dejo con el trailer de este notable western.