Selección mexicana: Las bases para un buen futuro están puestas

Antes cuando se hablaba de las selecciones menores de México, se hablaba de un subcampeonato en un Mundial sub-20 en 1977, algunos títulos dentro de la CONCACAF y poco más, era una historia con más fracasos que glorias, donde encontrábamos penosas participaciones en los torneos importantes y penosos episodios como el de los Cachirules, por el cual la selección mexicana no pudo asistir al Mundial de Italia en 1990. 

Sin embargo, el 2 de Octubre del 2005 la historia cambió, con la obtención del Mundial sub-17 en Perú, derrotando de manera contundente a la selección brasileña de Marcelo, Anderson, Renato Augusto y Denílson. Esa selección mexicana dirigida por Jesús Ramírez y con jugadores como Giovani Dos Santos, Carlos Vela y Héctor Moreno, dejó en claro que era una generación con una mentalidad diferente, una mentalidad ganadora.

En esa Copa del Mundo sub-17, Giovani Dos Santos ganó el Balón de Plata, quedando por detrás de Anderson (ahora jugador del Manchester United) y por delante de Nuri Sahin (ahora jugador del Real Madrid), mientras que Carlos Vela se llevó la Bota de Oro con 5 goles, uno más que Nuri Sahin.

Dos años más tarde, llegó el Mundial sub-20 en Canadá, donde la selección mexicana con la base de los campeones sub-17 más jugadores como Chicharito Hernández y Pablo Barrera, pasó la ronda de grupos con 3 victorias, venció a la selección de Congo en los octavos de final y cayó por la mínima diferencia contra la Argentina de Agüero, di María, Zárate y demás (que al final se coronó) en los cuartos de final. Giovani Dos Santos ganó el Balón de Bronce en ese torneo.

Unos meses más tarde, llegó un momento muy amargo para muchos de estos jugadores, el Preolímpico del 2008, cuando México quedó eliminado en la ronda de grupos, contando con jugadores como Guillermo Ochoa o Pablo Barrera. México solo pudo cosechar 4 puntos en un grupo accesible. Hay gente que puso de pretexto que jugadores como Ándres Guardado, Giovani Dos Santos, Héctor Moreno o Carlos Vela no pudieron asistir y que México llevaba una selección muy joven, pero lo cierto es que el fracaso fue enorme.

En esos 3 años, no apareció otra selección para destacar, pero en el 2009, en el Mundial sub-17 en Nigeria, México con jugadores como Diego Reyes y José Rodríguez, llegó hasta los octavos de final, cayendo eliminada frente a Corea del Sur. Destacando que en la ronda de grupos, venció a la Brasil de Neymar, Coutinho y Casemiro.

Esa generación formó parte de la selección sub-22 que representó a México en la Copa América del 2011, aunque de aquella selección solamente llegó Diego Reyes. Esa selección menor que jugó la Copa América, estaba integrada por gente como Hiram Mier, Miguel Ponce, Jorge “El Chatón” Enríquez, Nestor Araujo, Javier Aquino, Ulises Dávila y Dárvin Chávez, y fue reforzada por 5 jugadores mayores, de los cuales destacaban Oribe Peralta, Luis Michel y Paul Aguilar.

Cabe mencionar que esa selección sufrió bajas importantes durante la gira de preparación, ya que 8 jugadores fueron suspendidos por los dirigentes por meter prostitutas en la concentración, jugadores como Marco Fabián, Jonathan Dos Santos, Javier Cortés, Néstor Vidrio, Israel Jiménez y David Cabrera.

La actuación de la selección mexicana fue un desastre, perdiendo sus 3 partidos de grupo, aunque hay que ver que fue una selección menor que el resto y con muchas bajas que cayó siempre por un gol contra Chile que se quedó en Cuartos de Final, contra Perú que llegó a Semifinales y contra Uruguay que se coronó.

En esos días, la selección mexicana se coronó por segunda vez en la historia en un Mundial sub-17, jugando de local. Esa selección, dirigida por Raúl Gutiérrez, ganó todos los partidos que jugó, frente a rivales importantes como Holanda, Francia, Alemania y Uruguay.

A destacar queda que México tuvo en Julio Gómez (Balón de Oro), Jonathan Espericueta (Balón de Plata) y Carlos Fierro (Balón de Bronce) a los 3 mejores jugadores del torneo.

A los pocos días, entró en acción otra selección mexicana, ahora en el Mundial sub-20 de Colombia. Esa selección, dirigida por Juan Carlos Chávez y encabezado por jugadores como José Rodríguez, Néstor Araujo, Diego Reyes, Ulises Dávila, Alan Pulido y Jorge “El Chatón” Enríquez, no tenía un grupo fácil.

El grupo lo superaron en la segunda posición, solo por detrás de la Argentina de Lamela. En los octavos de final vencieron en penaltis a  Camerún, con una gran actuación del portero Rodríguez, que atajó los 3 penaltis que le tiraron. En los cuartos de final el rival fue el local, la Colombia de James Rodríguez, Luis Muriel y Michael Ortega, selección a la cual México no tuvo problemas para vencer.

En las semifinales se enfrentaron al favorito, a la Brasil de Gabriel, Danilo, Juan, Coutinho, Oscar y Alex Sandro. El partido era igualado, pero se definió con 2 goles de Henrique faltando 10 minutos en el reloj. En el partido por el tercer lugar, México venció de manera contundente a la Francia de Kakuta, Fofana y Lacazette.

Jorge “El Chatón” Enriquez ganó el Balón de Bronce, quedando por detrás de Oscar (ahora jugador del Chelsea) y de Nélson Oliveira (seleccionado portugués en la Euro 2012).

Tras ese verano en el que México se coronó en el Mundial sub-17, quedó en la tercera posición en el Mundial sub-20 e hizo el ridículo en la Copa América, empezó el camino rumbo a Londres 2012, con una selección compuesta por 3 generaciones.

El primer torneo que enfrentaron fue el de los Juegos Panamericanos 2011, donde México presentó una selección compuesta por jugadores como Hiram Mier, Diego Reyes, Néstor Araujo, Dárvin Chávez, Javier Aquino, Jorge “El Chatón” Enriquez y Miguel Ponce, reforzados por Jesús Corona, Jesús Zavala y Oribe Peralta. México no tuvo problemas para coronarse. Oribe Peralta finalizó el torneo como el goleador con 6 goles.

Cabe destacar que en el torneo no pudieron estar Marco Fabián, Jonathan Dos Santos, Javier Cortés, Néstor Vidrio, Israel Jiménez y David Cabrera, porque su castigo por indisciplina previo a la Copa América seguía en pie.

Luego vino el Preolímpico del 2012, en el cual México no tuvo problemas para ganarlo, venciendo en la final a Honduras, con Marco Fabián y Alan Pulido como los goleadores del torneo. La selección que presentó México fue muy parecida a la que presentó en los Juegos Panamericanos, solamente que no fueron refuerzos mayores, volvieron algunos de los castigados y se sumó al grupo Héctor Herrara, uno de los jugadores más destacados del torneo. La mala noticia fue la grave lesión de David Cabrera, uno de los pilares de esta selección y que no se recuperaría a tiempo para asistir a los Juegos Olímpicos.

Ya con el boleto a Londres en el bolsillo, México fue invitado al Torneo de Esperanzas de Toulon, junto a otras selecciones que participarían en los Juegos Olímpicos como Bielorrusia, Egipto, Japón y Marruecos. México no tuvo mayores problemas para coronarse, teniendo en Héctor Herrera (Balón de Oro) y en Marco Fabián (Bota de Oro con 7 goles) a sus mejores hombres. En este torneo se sumó el delantero Raúl Jiménez al equipo.

La lista de convocados para Londres 2012 fue la siguiente:

Destacando que jugadores que si daban la edad para asistir como Jonathan Dos Santos y Carlos Vela, rechazaron la convocatoria. Mientras que el entrenador del Manchester United, Sir Alex Ferguson, no prestó a Chicharito Hernández, por lo cual Luis Fernando Tena tuvo que convocar a Oribe Peralta para reforzar la delantera. Los otros dos refuerzos fueron Jesús Corona y Carlos Salcido.

El camino de México empezó con dudas, ya que luego de derrotar a la Gran Bretaña en una amistoso previo a los Juegos Olímpicos, cayó contra España y Japón dando una mala imagen.

El debut de la selección mexicana en el torneo aumentó las dudas y empezó a generar críticas hacía el entrenador y algunos de sus jugadores, principalmente hacía Oribe Peralta, ya que empataron contra Corea del Sur, siendo dominados por momentos por los surcoreanos y sin verse bien en el lado ofensivo. Con Corona siendo la figura, lo que nos habla de como jugaron los mexicanos.

Después, en los dos siguientes partidos las cosas se tranquilizaron, con las victorias frente a Gabón y Suiza, donde Oribe Peralta y Giovani Dos Santos se entendieron de maravilla, además de que en defensa se vieron muy sólidos. México con 7 puntos, no tuvo problemas para calificar como primeros de grupo.

En los cuartos de final se encontraron con Senegal, que venía de eliminar a Uruguay (uno de los favoritos) en la ronda de grupos. Pasada la hora de partido, México ya ganaba por dos goles, pero a falta de 20 minutos, los africanos empataron en cosa de 7 minutos, mandando el partido a los tiempos extra. En la prorroga, dos errores defensivos de Senegal fueron concretados por los mexicanos y avanzaron a la semifinal

En la semifinal se enfrentaron a Japón, que en la ronda de grupos le pasó por encima a España. El conjunto mexicano comenzó perdiendo con un gol  en los primeros minutos, pero se supo reponer y terminó superando de manera contundente al rival. Entonces pasaron a la final, donde ya con la medalla de Plata asegurada, buscarían ganar la de Bronce ante el gran favorito, Brasil.

Un gol en los primeros segundos y uno más con el partido ya en la recta final de Oribe Peralta, les dio el triunfo y poco importó un gol de Hulk en los minutos finales. La tarea del cuadro mexicano en labores defensivas fue estupenda, secando por completo el ataque brasileño, mientras que los mexicanos tuvieron otras buenas para hacer más grande la diferencia en el marcador. Se terminó el partido y México se quedó con la medalla de Oro.

La medalla de Oro más que otra cosa representa el buen trabajo logrado en las selecciones menores, un buen trabajo que se realizó durante 7 años, desde que Giovani Dos Santos y compañía se coronaron en Perú. Un proceso que tuvo momentos complicados, como el Preolímpico del 2008, como el hecho de que hubo una generación perdida en el camino que después se unió, como el hecho de perder todos los partidos en la Copa América, pero que al final se vio recompensado con la medalla de Oro en Wembley.

El trabajo de las selecciones inferiores además no termina con la obtención de esta medalla de Oro, ya que hay jugadores que en este proceso fueron importantes como Diego Reyes, Candido Ramírez o Erick “El Cubo” Torres que por la edad les alcanzaría para llegar a Rio de Janeiro 2016. Además de que pronto los campeones sub-17 en el 2011 irán tomando protagonismo en sus equipos de primera división, recibiendo oportunidades en la Copa y en la Liga.

En resumen, México a lo largo de estos 7 años ha tenido en sus selecciones menores a jugadores que han demostrado muchas cosas buenas en torneos internacionales, algunos con experiencia en Mundiales, en Copas América o en Copas Oro, hablando de torneos a nivel mayor, porque en torneos de selecciones menores, la experiencia le sobra a muchos de ellos.

Se puede hacer un bueno once con jugadores que han participado en torneos con las distintas selecciones menores en estos 7 años, sin contar refuerzos:

Tenemos entonces un equipo menor de 27 años, esto sin contar a otros como Diego Reyes, Néstor Araujo, Efraín Juárez, Néstor Vidrio, Jonathan Dos Santos, David Cabrera, Carlos Peña, Javier Aquino, Marco Fabián, Miguel Ponce, Javier Cortés, Ulises Dávila, Édson Rivera, Raúl Jiménez, Othoniel Arce, Jerónimo Amione o Alan Pulido que formaron parte de las distintas selecciones menores y que de igual manera destacaron en estos 7 años.

Jugadores como Ándres Guardado (25 años), Severo Meza (26 años), Jorge Torres Nilo (24 años), Eduardo Zavala (25 años), Elias Hernández (24 años), Hugo Ayala (25 años) y Jonathan Orozco (26 años), también tienen un buen futuro y lo hacen bien cuando son llamados a la selección mayor.

Además de que hay jugadores que le aportarían experiencia a estos jugadores y que lo han hecho bien en la selección mexicana, jugadores como Jesús Corona, Francisco Javier “El Maza” Rodríguez, Carlos Salcido, Aldo De Nigris y Oribe Peralta.

De hecho, este buen trabajo se ha reflejado en las convocatorias de la selección mayor, ya que antes del campeonato sub-17 en el 2005, en las convocatorias solo se veía a un jugador que militaba en Europa, Rafael Márquez, sin embargo, ahora son más los jugadores que militan en Europa y eso es algo que ayuda a la selección, además de que la liga mexicana ha crecido mucho, colocándose como una de las mejores de América.

Las bases están puestas para que la selección mexicana tenga un mejor futuro, algo que se ha ganado gracias al trabajo con los jóvenes que ahora se ve reflejado en una medalla de Oro, ahora es el turno de los entrenadores y de los jugadores para que esto sea aprovechado.

Con esto no digo que México vaya a ganar un Mundial en los próximos años, tampoco que pronto la selección mexicana estará a la altura de la española, alemana o italiana, pero de seguir trabajando así con los jóvenes, poco a poco las distancias se irán acortando.