Sensaciones primigenias

 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Un paseo por las inmediaciones del puerto de Palombera, desde la venta Tajahierro hacia Sejos, nos deparará algún que otro encuentro con las manadas de ciervos que allí habitan.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus)  Algún jovencito bareto.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Buscando un bosque protector se pueden cruzar ante tu incrédula mirada.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Y su patente nerviosismo.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Manadas de hembras con sus jovencitos.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus)
 Ciervo rojo (Cervus elaphus)
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Jugando.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Cambiando a zonas menos expuestas. 
 Ciervo rojo (Cervus elaphus)
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) Los machos han perdido su agresividad y comparten pastos pacíficamente.
 Bisbita alpino (Anthus spinoletta) También se puede disfrutar con algunas aves de montaña.
Zorzal charlo (Turdus viscivorus)
 Zorzal charlo (Turdus viscivorus)
 Camachuelo común (Pyrrhula pyrrhula)
 Camachuelo común (Pyrrhula pyrrhula)  Un bando de unos 15 camachuelos pusieron la nota de color a esta sencilla excursión.
 Ciervo rojo (Cervus elaphus) En la zona de Sejos otros grupos de ciervas pastaban tranquilamente.
Ciervo rojo (Cervus elaphus) Yo me tomaba un tentempié tranquilamente cuando una gran manada apareció a la carrera como de la nada, en una zona abierta en el monte de enfrente. Custodiándola y también al trote un gran macho miraba cada pocos metros hacia atrás. Por mucho que rastreé tras los cérvidos no encontré la causa de la estampida... pero a mí aquello me "olía" a lobo.  ¡Que intensa sensación!  ¡Olor a lo salvaje, a la vida y a la muerte!  ¡Olor esencial! ¡Buen pajareo para todos!