Sentosa, ciudad de vacaciones de Singapur

Como les gusta a los empresarios montar lugares exclusivamente turísticos donde se pierde totalmente el encanto de las vacaciones, ya que lo que te sueles encontrar en este tipo de sitios a lo Marina d´Or, no es más que un hormigueo de domingueros. Asia no es distinto, y aunque es cierto que hay lugares impresionantes que logran sorprender al viajero, también existen esos lugares artificiales que lo único que pretenden es sacarle la pasta al turista. En la ciudad más exclusiva, fashion y pija de Asia, Singapur, esto no iba a ser distinto. Sentosa intenta asemejarse a una isla paradisíaca del Pacífico pero, dado que este pequeño país tiene uno de los puertos más importantes, pues no lo consigue, ya que su agua ni es cristalina ni está muy limpia.

Aunque el hecho de que no pueda compararse con otras islas de la zona no sólo se lo debe a su puerto, sino que todo cuanto allí hay es artificial. Sentosa antiguamente era todo mar, por lo que ahora podemos encontrarnos ha sido construido hace sólo unos años. Además de palmeras y cocoteros, arena fina y las típicas casitas de madera que emergen del agua, este complejo turístico cuenta con un gran Resort de lujo y un parque de atracciones. De hecho, en las mismas oficinas en donde te venden los billetes de transporte para acceder a la isla, tienes la opción de comprar los tickets para el parque.

Asimismo, para entrar a Sentosa hay que pagar un pequeño peaje que ya está incluido en el billete de transporte. Hasta allí se puede ir en el Sentosa Express o en autobús. El precio en ambos casos es de 2 euros. Desde luego, aunque no es el lugar ideal para veranear, ya que está bastante masificado, si te encuentras de visita por la ciudad de Singapur os aconsejamos que os acerquéis a verlo, ya que es bastante curioso.