Ser o no ser ... madre

Después de mucho meditar (obligada por la mitosis de mi generación en estos momentos) me he dado cuenta de por qué no quiero ser madre. Y lo que más me preocupa de ello es que no es por el niño en sí, es porque odio a los padres.Este post me generará mucho rechazo, pero sinceramente me da igual. Si a estas alturas de la película alguien no entiende lo que quiero decir es que no me conoce o no es mi amigo realmente.Me explico. Los niños en sí, con sus defectos y sus grandes virtudes, pueden resultar una recompensa interesante. Recibir cariño, darlo sin espera nada, disfrutar momentos únicos, aprender de nuevo lo importante de la vida, etc… El problema es que llevo 30 años viendo padres a mi alrededory esa imagen no se me va de la cabeza. Hay de todo , como en botica, pero al contrario que cuando alguien se muere que de repente solo ves lo bueno, en este caso me pasa todo lo contrario. Solo recuerdo los testimonios terroríficos, las conversaciones tediosas, las madres repetitivas, los padres blasfemantes,y sobre todo, sobre todo, los comportamientos de los padres con sus hijos cuando estos están en público. Yo soy muy imperfecta, todo lo que un ser humano puede ser, y no me apetece serlo aún más. Encuentro dificil que pueda ubicarme en el punto medio entre la madre gritona, controladora e insoportable, y la madre odiosa para todos los que la rodean porque tiene al niño asilvestrado y molesta a todo el mundo. No quiero que todas mis conversaciones versen sobre pañales, no quiero tener que estar haciendo apología día y noche de lo que me ha cambiado la vida la maternidad, como si antes de ello hubiera sido una ameba, no quiero no tener tiempo para lo que me apetezca y lo que menos quiero es que un advenedizo sea más importante para mi que mis propios padres o que yo misma. ¿Egoista? Puede ser.Y por toda esta reflexión tendré que escuchar millones de críticas. Pero no me importa porque es lo que yo pienso. Y al igual que los que me odien ahora, yo también pienso que ellos están equivocados.Si un día consigo que todas estas imágenes de padres se borren de mi cabeza y solo me vengan las de personas normales que tienen hijos y son felices, entonces me lo replantearé.
Ser o no ser ... madre