Revista Medio Ambiente

Ser Valentina

Por Valedeoro @valedeoro

Ser Valentina
Hoy es mi cumpleaños, y quiero aprovechar este día para recordar mis "mandamientos" para ser Valentina. Son principios que me ayudan ser fiel a mi misma, aún cuando las expectativas de los demás son otras. Espero que la lista te inspire a crear tus propias reglas.

Hacer para ser

Me gusta pasar a la acción. Aún así es fácil que me quede atrapada en el parálisis de análisis, en búsqueda de la solución perfecta. Por experiencia me va mejor cuando tomo una decisión y empiezo.

Siempre puedo cambiar o corregir el trayecto más adelante. Va de la mano con la idea de que tengo que actuar de acuerdo con lo que quiero conseguir. Para ser corredora, tengo que correr. Para verme como escritora, tengo que escribir. Y si quiero cambiar inspirar mis lectores a encontrar su propio camino, tengo que descubrir el mio propio primero.

Usa tu agenda

Tengo muchas ideas. Al mismo tiempo quiero dormir siete horas cada noche y tengo hijos gemelos. Por definición mi día tiene un límite de horas. Al añadir todo a mi agenda (incluyendo un periodo de seguridad entre cada actividad), me obligo a respetar mis propios límites, dando prioridad a aquellas cosas que realmente importan. Porque seamos honestas: el momento de "cuando tenga tiempo" nunca llega.

Comunica con claridad

No puedo esperar que otras personas lean me mente o que sepan lo que quiero y lo que necesito (o que lo harían si lo supieran). Tengo que pedir lo que quiero. Es mi responsabilidad solicitar lo que necesito. También significa que tengo que aceptar recibir un no, de vez en cuando. Y eso está bien. Un "no" claro es mejor que quedarme atascada en el lamento del "debería haberlo sabido". No puedo leer la mente de otras personas. Ellos tampoco saben leer la mía.

Esto no te matará

A veces no sale como lo esperaba. Vivo situaciones incómodas. Paso por momentos de inseguridad. Y aún así, el desconcierto y el agobio que siento en este momento no me matará. Viviré para contarlo. Mirando hacia atrás, ojalá habré aprendido algo, o acabaré riéndome de la situación.

Cuándo me preparo para una conversación difícil, cuando me encuentro con una situación incómoda, puedo recordar la sensación de la salida de una maratón: ¡Esto no será fácil! ¡Probablemente sentiré dolor en algún momento! Pero puedo hacerlo. No soy la primera en hacerlo.

Esto también pasará

Es uno de los secretos de la maternidad: es una fase. Es uno de los secretos de la maternidad: es solo una fase. Para bien o para mal, la situación actual no durará para siempre. Miraré hacia atrás con cariño y alegría o con alivio de haber logrado superarlo. Si es genial, lo disfrutaré ahora. Si es difícil, lo aguantaré con gracia. Cuando no puedo cambiar algo, recordaré: es solo una fase, esto también pasará.

Escucha a tu cuerpo para escuchar tu alma

Respirar. Escuchar mi pulso. Registrar ese dolor de cabeza. Mi cuerpo generalmente sabe el estado en el que estoy y si necesito dormir, un abrazo o simplemente un momento tranquilo para mí. De hecho, mi cuerpo lo sabe mejor que mi mente lógica (a quién le encantaría estar a cargo todo el tiempo). Tomar un momento para escuchar a mi cuerpo en lugar de racionalizar todo puede cambiar mis planes por ahora, pero es mucho más sano a largo plazo.

Déjalo ir

Si no me sirve, si no embellece o mejora mi vida, es hora de dejarlo ir. Esto funciona tanto para cosas como para emociones, actividades y personas. También es uno de los principios del minimalismo: Guárdalo, si agrega valor a tu vida. Déjalo ir, si no tiene ningún propósito.


Volver a la Portada de Logo Paperblog