Series policíacas nórdicas

Nordic noir: las series que vienen del frío

Hace más de una década, un fenómeno literario sacudió el mundo para poner de moda un subgénero que no ha hecho más que ganar adeptos. Con la trilogía Millennium, iniciada con Los hombres que no aman a las mujeres, Stieg Larsson ponía de relieve un subgénero en buena forma gracias a autores como los suecos Henning Mankell o Maj Sjöwall.

Tuvo lugar entonces una eclosión de autores e historias. Enmarcadas en ambientes fríos y remotos, principalmente nevados y sombríos, nos presentaban crueles asesinatos en localidades en apariencia tranquilas. La dicotomía moral entre una sociedad avanzada como la nórdica, con un estado del bienestar asentado y la proliferación de escabrosos crímenes se convirtió en la seña de identidad del nordic noir.

Si hablamos de series de televisión, el subgénero comenzó a ganar popularidad a finales de la década del 2000 con series como las danesas The killing (que después vería un estupendo remake americano) o Bron (El puente), que asentaron las bases de un buen número de dramas policiacos escandinavos que vendrían después como Bordertown, Trapped o Wallander, siendo sus constantes influenciadas en obras de otros países como las británicas River o Marcella.

En la actualidad, el noir nórdico sigue muy vivo gracias a unas interesantes propuestas que podemos encontrar en varias plataformas. Como muestra representativa, hablaremos de tres series actuales de tres países escandinavos diferentes: viajaremos a Finlandia, Islandia y Noruega.

Nordic noir: las series que vienen del frío

Deadwind

Comenzamos nuestro gélido viaje por Helsinki, la capital finesa en la que se desarrolla la serie de Netflix Deadwind. El 1 de julio llegó la segunda temporada de este policíaco originalmente titulado Karppi por el nombre de la inspectora protagonista. La serie sigue los pasos de ésta ( Pihla Viitala) y su compañero Nurmi ( Lauri Tilkanen) enfrentándose a despiadados asesinos.

Deadwind cumple con todas las máximas del subgénero: ambiente invernal, protagonista fría y distante atormentada por la pérdida, macabros crímenes... La serie no es ninguna maravilla, pero se las apaña para presentar unos casos atractivos e interesantes en todo momento, con algunos giros inspirados y otros no tanto, buen ritmo y una pareja de investigadores con bastante química.

Los asesinatos del Valhalla

Seguimos en Netflix para dar un salto todavía más septentrional y dirigirnos a la glacial Islandia. Allí tiene lugar la serie Los asesinatos del Valhalla, estrenada este año, que sigue las investigaciones de una veterana inspectora islandesa ( Nína Dögg Filippusdóttir) y otro policía de Oslo (un Björn Thors más seco que el esparto) para dar caza a un asesino en serie que mutila los ojos de sus víctimas.

La serie no innova, pero teje una intriga sólida y sórdida alrededor de unos protagonistas cuyas tramas personales van ganando atractivo durante la temporada. Destaca la excelente ambientación y factura técnica, la oscuridad que trasciende la pantalla y los espectaculares paisajes islandeses que te transportan a otro mundo.

Wisting

Terminamos nuestro tour escandinavo en Noruega con Wisting. La serie, emitida en AMC España, adapta la saga de novelas de Jørn Lier Horst protagonizadas por el detective de homicidios William Wisting ( Sven Nordin), en esta ocasión acompañado por la agente del FBI Maggie Griffin ( Carrie-Anne Moss, nuestra querida Trinity de Matrix). El objetivo: detener a un asesino en serie estadounidense que emigró a una pequeña localidad noruega a seguir haciendo de las suyas.

En la primera temporada, que adapta un par de novelas, encontramos diez episodios y dos casos para el bueno de Wisting. En ambos tendrá la inevitable colaboración de Line, su entrometida hija periodista aficionada a jugar a los detectives.

Llama la atención la disparidad de métodos entre el FBI y la policía noruega, el realismo que desprende una serie alejada de típicas "americanadas" y efectismos. Intriga policial y drama se dan la mano en la ciudad balneario de Larvik, otro punto a marcar en el mapa del buen nordic noir.

Cinéfilo/seriéfilo aficionado a la novela negra y de ciencia-ficción. En ocasiones junto letras. Autor de las novelas Universo salvaje y La sangre no salta