Revista Cocina

Setas rebozadas con alioli vegano de ajo negro para celíacas

Por Lapastanoengorda

Holi. El otro día me acordé que cuando veraneaba en Galicia con un color de pelo horrible debido a la camomila, comía muchas veces en un restaurante que no recuerdo cómo se llamaba, pero me acuerdo muy bien de unas setas empanadas con alioli que me flipaban, creo que cuando iba solamente pedía ese plato varias veces. En ese momento no cocinaba pero la intención estaba latente, 12 años después aproximadamente, me dio la morriña y aquí están la versión vegana de esas setas.

He dudado muchísimo en el título, no sabía si poner rebozadas o empanadas, lo he pasado fatal, joder. Al final he puesto setas rebozadas pensando que si pongo empanadas se daría por hecho que llevan pan rallado, y como esta versión es celíacas friendly pues no lleva gluten.

Para hacer estas setas lo primero que necesitas es tener setas, puedes comprarlas tu súper de confianza, pedirle a tu vecina, irte al pueblo y cogerlas tú misma o utilizar tu método habitual para conseguir alimentos, yo ahí no me meto.

El rebozado es demasiado fácil,, siempre contesto a las quejas, básicamente lleva leche de arroz, harina de garbanzo, un poco de perejil con ajo seco en polvo y si te pones tonta puedes echarle un poquito de sal. Las medidas no las he calculado, soy un poco malo para eso, piensa que tiene que quedar una textura parecida al huevo como se utiliza en las tortillas por ejemplo, mira a ver si dos partes de leche con una de harina te van bien, una vez batido añade ajo y perejil en las cantidades que te apetezcan. yo lo hago con batidora para no cansarme, si estas medidas no funcionan puedes mandarme un mail quejándote a [email protected]

Supongo que el siguiente paso te lo imaginarás, pero por si la empanada eres tú, pues te lo cuento. Coge las setas y frótalas con un paño húmedo por encima, si las lavas debajo del grifo pierden mogollón de sabor y además absorven agua, aquí lo que interesa es que se quede el rebozado pegado, no el agua. Una vez que pienses que están limpias y no vas a comer arena, sumérgelas como si fueran sirenas en el mejunge y rápidamente mételas en una sartén con abundante aceite. Oh sí, esta receta es de fritanga, soy muy malo, qué le vamos a hacer, procura que sea aceite de oliva virgen extra y que no lo hayas recalentado muchas veces. Luego las pones en papel absorvente para que escurran y listo.

Para hacer el alioli de ajo negro necesitas ajo negro, aceite del que quieras y leche de soja sin azúcar. Si te interesas un poco por saber cómo se hace una veganesa, en la versión con leche de soja verás que todo el mundo dice que tienen que estar los líquidos a la misma temperatura, ahora que es verano con sacar de la nevera la leche cinco minutos antes te vale, no temas.

Bueno va, pon un poquito de leche de soja sin azúcar y sin aditivos en un vaso para batir, cuando digo poquito quiero decir un par de dedos, yo al principio me filmaba echando leche y siempre se me cortaba, si se te corta el sabor es el mismo pero la textura no y los ñus pueden quejarse, para no quedar mal delante de ellos sé obediente y pon poca leche. Luego añade aceite del que se te antoje hasta que te parezca una cantidad adecuada que vayas a comerte en los próximos días, añade un par de ajos negros y un ajo blanco, o la cantidad que te inspire. Pon la batidora, métela hasta el fondo, dale caña a velocidad considerable y ve subiendo poco a poco hasta que esté todo bien montado.

Si a estas alturas todavía no sabes lo que es el ajo negro, te lo cuento así por encima. El ajo negro procede del ajo blanco, lo fermentan a cierta temperatura con cierta humedad y cierto tiempo que desconozco en lugares oscuros y tenebrosos, el resultado es un ajo que queda más pequeñito, es cremoso y untable, además su sabor no tiene nada que ver con el ajo convencional. Sorprendentemente después de este proceso queda un sabor dulce, puedes desayunarlo tranquilamente con un poco de pan de espelta sin miedo a que te repita durante todo el día o utilizarlo en recetas como esta. Yo cuando lo probé estuve bastante tiempo enganchado, se dice que al pasar por este ritual de fermentación multiplica sus propiedades por 10, a mí me parece un poco exagerado pero teniendo en cuenta las súper propiedades del ajo, imagínate si lo multiplicas por cualquier número por pequeño que sea.

Bueno, ponte a hacer esta receta y cuélgala en stories. Muak!

Setas rebozadas con alioli vegano de ajo negro para celíacas

Volver a la Portada de Logo Paperblog