Shelfordella tartara – Runners

Cucaracha de bosque – Shellfordella tartara

Generalidades.

La cucaracha de bosque seduce por su prolificidad y su incapacidad de trepar por el cristal; además tampoco vuela aunque los machos son alados. Alcanza unos 25-30 mm de largo y una anchura aproximada de 8-10 mm. Los machos son de color pardo rojizo a marrón, mientras que las hembras son ápteras y lucen una coloración pardo chocolate a negra. Lamentablemente puede sobrevivir mucho tiempo en el terrario y, en ciertas circunstancias, incluso reproducirse, por lo que si se da el caso se han de temer daños en la instalación 0 en puestas que hayan pasado por alto. Es consumida principalmente por los saurios y anuros de mayor tamaño. El contenedor de cría. Para el cultivo se utilizan cajas de plástico (45 x 35 x 30 cm) y demás recipientes que cierren herméticamente, en los que hay que practicar orificios de ventilación que se cubren una con rejilla metálica de malla fina. También pueden utilizarse los recipientes de plástico ya mencionados porque las medidas del armario de cría están adaptadas a ellos. En este caso la tapa es un cristal con orificios de ventilación tapados con tela mosquitera. Como sustrato y alimento básico se utiliza la mezcla de los autores; el grosor del sustrato será de 3 cm. Como lugar de descanso sirven las conocidas hueveras, que se cortan en cuatro pedazos. Según sea la densidad de población habrá de añadirse más hueveras.

Cultivo.

Para disponer de criadero floreciente es necesario un plantel reproductor inicial compuesto por unos 100 ejemplares. Las hembras depositan una ooteca regularmente (aproximadamente cada 14 días), de/la que pueden nacer hasta 30 crías al cabo de 14 días más.

Manejo.

Dado que estas cucarachas son muy rápidas, han de manejarse con mucha precaución. Lo mejor es verterlas en recipientes de paredes lisas u ofrecerlas con pinzas.