Continuando con las recetas de fideos Shirataki de Konjac, hoy os traigo estos espectaculares Shirataki Negros. Los acompaño de unos chipirones enanos, que se conocen como Calamar Puntilla. Estos los he encontrado en Mercadona, en la sección de congelados. Cuestan 2,85 € un paquete de 500 gramos. También he comprado en Mercadona la tinta de calamar, aunque la tenéis en cualquier pescadería.
La idea de hacer Shirataki negros la tomé del blog italiano Con un granello di Sale, del que me habló mi amiga Liliana. (Se pueden leer las recetas utilizando el traductor de Google). Y resulta que Yes, I Du-kan los había hecho antes. ¡Minipunto para las Dukanianas españolas!
Ingredientes (2 raciones)
- 1 paquete de fideos Shirataki de Konjac
- 500 gramos de Chipirones o Calamar Puntilla** (son así de pequeños)
- 2 sobres de tinta de calamar (en pescaderia o en congelados)
- 1 vaso de caldo de pescado bajo en grasa
- una pizca de sal marina gruesa
- 2-3 gotas de aceite
- 1 cucharada de queso de untar 0% o queso de yogur casero (opcional)
**Si vais a usar calamares congelados, ponedlos a descongelar la noche anterior. Lavadlos poniéndolos en un bol con agua fría, escurridlos bien y secadlos en un paño de cocina limpio o con papel de cocina.
Preparación
- Sacamos los Shirataki del envase, desechamos el líquido de conservación y los lavamos bien bajo el chorro de agua fría, usando un escurridor.
- Abrimos un sobre de tinta de calamar, cortando con unas tijeras. Ponemos la tinta en una taza y añadimos un vaso de caldo de pescado, bien caliente. Removemos para disolver la tinta. Ponemos los Shirataki en el caldo negro y dejamos reposar de 5 a 7 minutos. Esto le dará sabor a los fideos y un color negro suave.
- Escurrimos los fideos y los salteamos un par de minutos en una sartén. Podemos añadir una cucharada de queso de untar 0% o queso de yogur para hacerlos más jugosos.
- Si queremos unos fideos más oscuros (como los de la foto) añadimos ahora la tinta del segundo sobre de tinta de calamar. Removemos hasta que se mezcle bien y reservamos.
- Hacemos los chipirones: en una sartén limpia y muy, muy caliente ponemos 2 o 3 gotitas de aceite, echamos una pizca de sal gruesa y inmediatamente añadimos los chipirones. Como son tan pequeños, estarán listos en menos de un minuto (se ponen de un bonito color rosa). Apagamos el fuego y retiramos de la sartén.
- Servimos con los Shirataki Negros. Yo los he acompañado con cebolla caramelizada y mi Salsa de Ajo para aperitivo.
Caramelizar cebolla sin aceite
Cuando vi en este blog la receta para caramelizar cebolla sin aceite supe que tenía que grabar esto en vídeo. Pero al contrario de lo que le pasa a Unami, mis cebollas no sueltan nada de agua, así que se la tengo que ir añadiendo yo. El proceso es muy sencillo y rapidísimo: yo caramelizo las cebollas en algo menos de 10 minutos. Necesitamos
- una sartén
- 2 cebollas de buen tamaño
- una pizca de sal marina gruesa
- algo menos de 1 gramo de bicarbonato
- medio vaso de agua fría
- 1 cucharada de vinagre de manzana o vino blanco y unas gotas de edulcorante (opcionales)
Como imprimir esta receta
Preparación
- Cortamos 2 cebollas en tiritas
- Ponemos la sartén al fuego y dejamos que se caliente bien (la mía casi humeaba)
- Echamos la cebolla en la sartén, añadimos una pizca de sal gruesa y una pequeña cantidad de bicarbonato. Muy, muy poquito. Como la punta de una cucharilla de las pequeñitas, de las del café.
- En menos de un minuto la cebolla empieza a tomar color, Vamos a ir removiendo con una cuchara de madera. Si como a Unami, la cebolla os suelta líquido, perfecto. Si como a mi, se os va secando, empezad a añadir agua fría, una cucharada de cada vez.
- Vamos removiendo la cebolla. Cada vez que veais una zona en la sartén en la que parece que se está haciendo una costra, añadid otra cucharada de agua. La cebolla se irá ablandando y tomando un bonito color dorado.
- Cuando esté a vuestro gusto (en mi caso, en unos 8 minutos) podéis añadir una cucharada de vinagre blanco, de vino o de manzana, y unas gotitas de edulcorante para potenciar el sabor del caramelizado. Apagamos el fuego y listo.
Podéis conservar esta cebolla en la nevera, en un recipiente con tapa. Se conserva durante más de una semana y os puede valer para acompañar cualquier otra receta salada o incluso para tomar con unos Chips de Surimi o unas Galletitas de Aperitivo (Crucero)
Mirad que idea tan buena
Para hacer una presentación aún más bonita he utilizado un aro de emplatar casero, que he hecho siguiendo las instrucciones de este vídeo de Facilísimo Cocina.