Si buscas empleo y este no sale, hay fórmulas para emprender un negocio sin inversión.
Todos sabemos lo difícil que se ha puesto encontrar empleo y por eso, es momento de analizar la situación. Lógicamente queremos un empleo para conseguir los ingresos económicos que este nos aporta, por tanto, si el empleo no llega, lo que hay que plantearse son vías alternativas de ingresos.La primera barrera que hay que vencer es la del miedo, o la de la inseguridad. La barrera de no creernos capaces de emplearnos a nosotros mismos y la segunda barrera, es la que nos han inculcado de que montar un negocio o trabajar por nuestra cuenta, es costoso. Eso son conceptos del pasado.
Vencer el miedo, se consigue tomando conciencia de nuestras capacidades. Tomándonos el tiempo necesario para mirar en nuestro interior y descubrir que sabemos hacer muy bien. Descubrir eso, nos hace fortalecer nuestra autoestima ya que descubrimos facultades y valías que la situación de estrés generada por la carencia de empleo nos oculta. Todos sabemos hacer algo mejor que nadie.
Una vez que descubrimos eso, debemos concienciarnos de que tenemos un valor, un tesoro. Tenemos un producto que podemos comercializar y que hay personas que estarían dispuestas a pagar por eso, que hay personas que buscan ese producto, ese servicio o ese conocimiento que nosotros tenemos, por tanto el primer paso, es NO infravalorar lo que sabemos. Todos somos útiles.
El segundo paso es vencer la barrera económica. Creemos que montar un negocio cuesta dinero, rectifico, creemos que cuesta una gran cantidad de dinero. En el pasado era así, a día de hoy, hay fórmulas para emprender sin dinero o por muy, muy poco.Consiste, no en montar una gran empresa, sino en adaptar tu producto, tu servicio o tu conocimiento a un modo de difusión que te sea permisible.
Cuando trabajamos para una empresa, lo que realmente vendemos, es nuestro tiempo. Nuestro tiempo a cambio de realizar una labor dentro de esa empresa, por tanto, consiste en dedicar tiempo a adaptar eso que haríais en una empresa y conseguir hacerlo desde casa y una vez hecho, ofrecérselo a una empresa, venderle no vuestro trabajo, sino vuestro servicio ya realizado.
Fácil, no digo que sea, pero imposible tampoco. Se puede utilizar internet y las redes sociales para todo y todos sabemos hacerlo. Os invito a reflexionar sobre vuestras cualidades y sobre como podéis rentabilizar estas cualidades a través de internet. Os invito a pensar, cuantos servicios o productos necesitáis comercializar en un mes para obtener el sueldo que os daría una empresa a fin de mes. Os aseguro que tras esta reflexión, vuestros miedos y vuestros conceptos de autoemplearse van a cambiar.
David DíazAutor de:"Como ser mileurista con un blog"