Hoy voy a investigar un poco más la historia y origen de uno de los cocteles más clásicos que hay, el Sidecar. Un coctel típico de aperitivo, similar al Martini o Cosmopolitan.
Entrada del Harry´s New York Bar de ParisAceptado por casi todo el mundo, el padre de la criatura es el escocés Harry McElhone, propietario del famoso bar de Paris, Harry´s New York Bar, el cual podemos seguir visitando hoy en día en el número 5 de la Rue Daunou, entre la Avenue d l´Opéra y la Rue de la Paix , en pleno Place Vendome, ya que sigue funcionando como uno de los bares más emblemáticos de la ciudad de las luces y considerado como uno de los mejores bares del mundo.
Harry McElhone, comenzó como barman en este local, en 1911, tras llegar de Londres, cuando aún era propiedad de un famoso jinete de carreras de la época Tod Sloan y un tal Clancy, propietario de un local en Manhattan, los cuales, ni cortos ni perezosos lo trasladaron a París como el que mueve una foodtruck de Lastres a Gijón. Tras sufrir algunos apuros económicos el bar fue adquirido por Harry en 1923, quien modificó el nombre del mismo, añadiendo su nombre, y trabajando en el hasta su muerte en el 58.
Como no en este bar también coloco sus posaderas nuestro querido Hemingway, al cual recordareis de otros cocteles como Daiquiri o Mojito, pero no solo el, todo el famoseo de la época paso por este ilustre café de las letras moderno, como Coco Chanel, Rita Hayworth, Humphrey Bogart,… vamos, los de siempre, solo me falta Errol Flynn.
También se cuenta la historia de como Ian Fleming, en el cuento corto “Panorama para matar” (From a View to a Kill), no en la película del mismo nombre, el propio James Bond, visita este local en su primera visita a Paris con 16 años, y ha quedado como anécdota de esas que forjan a este tipo de locales, la forma en que el protagonista decía al taxista la dirección del local para que lo llevara, “Sank Roo Doe Noo” en francés “Cinque Rue Daunou”, hasta tal punto que a pasado a ser algo así como el lema del bar.
Harry, tiene además el merito de ser el creador entre otros de los famosos cocteles como White Lady o el Bloddy Mary, y padre del creador del Blue Lagoon, Andy McElhone, su sucesor al frente del local.
La historia del Sidecar, cuenta como el nombre del coctel surge por un supuesto capitán del ejército que todas las noches pedía esta bebida para combatir el frío y el resfriado, por aquello del limón claro. El caso es que sus efectos eran tan fuertes que tenían que llevarlo a su casa en el sidecar de su moto. Una historia a la altura del local y del coctel.
Como os comentaba su creación es atribuida a McElhone el cual se la atribuye en su libro Harry’s ABC of Mixing Cocktails, aunque en las primeras ediciones se dice que atribuyó el mérito a Pat McGarry, barman del Club de caballeros de Buck, de Clifford Street en Londres.
También el Hotel Ritz de Paris reclama la creación, atribuyendo su creación a su barman Frank Meier, en el 23, si bien existen referencias al mismo anteriores, por lo que esta historia no resulta muy convincente. Lo que sí es cierto que en este hotel, en su conocido bar Hemingway podemos tomar el más caro, ya que está elaborado con Cognac, de elaboración anterior a la plaga de filoxera que terminaron con casi la totalidad de viñedos de toda Europa. Por el módico precio de 1350 e te tomas el coctel y te quedas como estas.
Los ingredientes del coctel en su versión más clásica son:
- 1/3 de triple seco como Cointreau o Grand Marnier
- 1/3 de Cognac aunque supongo que cualquier brandy nos servirá para probarlo
- 1/3 de zumo de limón natural
Se pone todo en coctelera con unas piedras de hielo y se agita bien. Se sirve colado en copa de coctel con una corteza de limón.
Como todo se pueden encontrar muchas variantes, pero en principio la versión clásica nos habla de partes iguales de los tres ingredientes. Es un pelotazo, nada que ver con el típico coctel de sombrilla en hamaca. Cierto es que es perfecto para el aperitivo.
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