Como cada año al principio del otoño tienen lugares las siembras de los cultivos de inviernos, ya sea su finalidad para cosecha o para alimento del ganado vemos como se van preparando las tierras y acondicionandolas para su siembra. Aunque este año el otoño empezó un poco tardío debido a las lluvias, se aprecia como comienzan a moverle barbechos y rastrojos con las maquinillas, para luego dejar pasos a sembradoras. Hoy vamos a hablar de la siembra del heno, ese pasto segado verde que hace que los rumiantes se mantengan en el invierno.
Heno
La mayoría de los henos que se siembran con finalidad comercial suele tener como siembra exclusivamente un cereal, que suele ser avena. Algunos han apostado por triticale, pero en su mayoría suele ser avena. Aquellos ganaderos que suelen hacer su siembra de henos, suelen aportar una mezcla de cereales. Algunos optan por avena mezclada con cebada, que aporta mas consistencia al heno. Pero lo que realmente hace un heno espectacular es la Veza mas avena. El mayor problema es saber cual es la proporción adecuada, si echas mas veza no crece lo suficiente como para ser segada y si echas mucha avena no crece la veza. La mejor opción es un 40% de veza y el resto de avena. Debe estar bien mezclada, así aseguraremos una buena siega.