Silk-épil 7 con sus accesorios
Hace poco caí en la tentación de comprarme una depiladora. Llevo toda la vida afeitándome con cuchillas y ya estaba notando lo irritada que tenía la piel, sobretodo en las axilas y área del bikini durante el verano, época del año en que nos toca, o al menos a mi, depilarme diariamente. Antes de comprar, decidí investigar precios y opiniones acerca de las mejores, la mayoría recomendaba la Silk-épil de Braun. La verdad es que en mi búsqueda prácticamente no encontré un comentario negativo acerca de esta depiladora, más allá de lo típico, que duele un poco pero con la bolsa de gel que traen las nuevas no duele nada, que se encapsulan los vellos pero que esto se resuelve exfoliando la piel continuamente y que quedaban manchitas rojas después de depilar pero para esto recomendaban hacerlo durante la noche para tener la piel perfecta por la mañana.Después de leer todos estos comentarios estaba súper decidida. Esa misma tarde me fui a la tienda a ver que encontraba. Casualmente habían puestos de promoción de las depiladoras Silk-épil con la promesa de que si la probabas durante 3 meses y no te gustaba podías devolverla y ellos te regresarían el importe entero. La chica que me estuvo explicando me ofreció la Silk-épil 7, una depiladora a prueba de agua que trae 5 cabezales distintos para que puedas usar el mismo aparato en todo el cuerpo, desde las piernas hasta la cara.
Silk-épil 7 de Braun
Mi primera impresión al sacar la Silk-épil de su caja fue que era bonito y femenino, un aparatito blanco con brillantina <3. Ese primer día llegué tarde a mi casa como para darme una ducha y probarlo bajo el agua, pero no iba a quedarme con las ganas, así que lo probé en seco. ¡Qué dolor! Ya había leído comentarios de esto, no me iba a rendir todavía. Busqué la bolsa de gel para ver si era cierto que el frío hacía que doliera menos. ¡No lo hacía! Dolía igual que antes, solo que ahora tenías la incomodidad de tener la piel helada. Después de eso lo guardé y pensé que lo mejor sería darle otra oportunidad al día siguiente con más calma.Eso hice, al día siguiente me armé de valor y comencé a depilarme poco a poco las piernas. No voy a mentir, me tardé más de una hora y recargar la Silk-épil dos veces para depilarme la parte de abajo de las piernas. Al día siguiente lo intentaría con la parte de arriba. Así pasaron las primeras semanas. Un día una parte y al día siguiente otra.
Todo esto habría valido la pena si al terminar hubiera tenido el resultado que te pintan en los comentarios y en las publicidades. Mis piernas no quedaron suaves ni perfectas, lo cierto es que aunque acabara de depilarme, me quedaba la piel como si ya me estuvieran creciendo los vellos. Y para colmo, tenía que pasarme la Silk-épil TODOS LOS DÍAS, igual que antes con la afeitadora.
Después de dos meses de prueba me di cuenta de que esto no era para mi, me dolía tanto que tardaba mucho en volver a depilarme, en conclusión no podía usar shorts todos los días. Nunca me quedaba la piel suave y se me enquistaban los vellos también.
A pesar de todo esto no lo devolví, y el motivo es que, en mi opinión, la Silk-épil solo se salva a la hora de depilar la cara, para quitarme parte de las cejas y vellitos de más que crecen en la cara, sigue doliendo, pero a esto ya estaba acostumbrada por las pinzas.
Mi opinión para todas es que nadie es igual. Y lo que le funciona a algunas o a la mayoría como en el caso de esta depiladora, no tiene porque funcionarnos a todas. Pero como todo, se trata de probar para poder decidir.
¿La has probado? Cuéntanos tu opinión ;)