T.O.: Abduction. 2011Gotham Ent., Vertigo Ent. Director: John Singleton. Guión: Shawn Christensen. Reparto: Nathan (Taylor Lautner), Karen (Lilly Collins), Frank Burton (Alfred Molina), Dra. Nennett (Sigourny Weaver), Kozlow (Michael Nyqvist).
Nathan es un chico normal, que vive con sus padres, sale con sus amigos, se emborracha, se enfada con sus padres, va al instituto, etc. Pero un día, debido a un programa de internet donde están las fotos de niños desaparecidos ve una imágen que le incita investigar sobre su pasado. Al indagar en él descubre que sus padres no son lo que realmente aparentan y que su vida nada tiene que ver con lo que le habían contado. Se verá envuelto en una trama de espionaje de la cuál Nathan es el objetivo.
Sin Salida es un producto creado por y para el lucimiento de una de las estrellas de moda de Hollywood. El resultado no es, ni siquiera un poco estimulante, ni entretenido. Desde el comienzo, cuando vemos a Taylor Lautner sin camiseta, sin motivo alguno, nos podemos imaginar por donde van a ir los tiros el resto del metraje. Está todo tan acoplado para que Lautner brille en pantalla que la historia resulta muy forzada y, sobre todo, muy poco creíble. El interés del relato comienza siendo averiguar el verdadero pasado de Nathan y observar la búsqueda de sus padres, pero el guión acaba derivando toda la atención en persecuciones absurdas, repletas de clichés y diálogos insufribles. Por no hablar de los dos protagonistas, Lautner y Collins, que son lo peor de toda la película.
En fin, una película que ya estaba limitada desde el momento en que se eligió al co-protagonista de Crepúsculo para que interpretase el papel principal. Tal vez si éste hubiese estado a cargo de otro jóven actor más talentoso (Eisenberg, Garfield, Affleck...) la cinta habría ganado algún punto más, sobre todo en interpretación. (2/10)