Smart Cities

¿Cómo podemos hacer que una ciudad sea un lugar más atractivo?

No es nada fácil esta respuesta. En 2030 el 60% de la población vivirá en ciudades. El crecimiento y la gestión de las ciudades es compleja. Las ciudades no son únicamente infraestructuras físicas, carreteras, servicios, edificios municipales. Hay otras infraestructuras tecnológicas que acompañan el crecimiento y el modelaje de la ciudad que se quiere construir. La planificación es fundamental para determinar cuál es el “aroma” de la ciudad que se quiere. La evolución de las ciudades, ¿qué dirección están tomando?. Obviamente no hay una única respuesta, pero sí hay ciertas preferencias y prioridades que comienzan a definir las ciudades:

Economía Naranja

• Ciudades verdes:  Focalizan su esfuerzo en el abastecimiento y uso sostenible de energía, así como en soluciones sostenibles a los problemas de movilidad.
• Ciudades naranjas: aquellas que consideran que las industrias creativas, en todas sus manifestaciones, son un polo de atracción de desarrollo económico y turístico.
• Ciudades orientadas a la nueva economía: Priorizan la atracción de empresas de base tecnológica, impulsan las habilidades tecnológicas de las pequeñas y medianas empresas locales, diseñan parques empresariales donde la universidad, spin offs y emprendedores de base tecnológica encuentren el espacio, el incentivo y el mercado para crecer.
• Ciudades de aprendizaje: Orientadas a conectar la educación con el mercado de trabajo. Preocupados por la calidad educativa, la incorporación de nuevas metodologías en el aula y especial énfasis al desarrollo de las competencias digitales para fortalecer perfiles profesionales.
• “Nuestra Ciudad“. Se potencia la identidad de la ciudad para que transcienda de las paredes del Ayuntamiento. Cuando la ciudad está en constante discusión, trabaja el fortalecimiento de la auto-organización y fomenta la actividad empresarial con los datos abiertos. Esta orientación suma la visión de accesibilidad universal. Que la cuidad sea para todas las personas. Con independencia del “perfil”, del “arquetipo” de ciudadano, encuentra un modo, un espacio, un canal de acceso y de tránsito para que todo el mundo esté integrado.
• Ciudades seguras: la seguridad física, la inteligencia, la ciberseguridad y la seguridad inteligente en el contexto empresarial son las líneas de trabajo.

Es importante definir qué dirección tiene que tomar la ciudad para lograr resultados visibles. Los planteamientos  anteriores se traducen en modelos de ciudades que tienen referentes e íconos

específicos a quienes podemos analizar para identificar buenas prácticas. De este modo algunas ciudades europeas destacan del siguiente modo:

• Copenhagen: Seleccionada como capital verde europea en 2014, tiene una de las emisiones mas bajas de carbono / por habitante en el mundo.
• Amsterdam: El 67% de los desplazamientos se hacen caminando o en bicicleta. Tiene unas tasas de reciclaje de basuras más elevadas de Europa. Amsterdam Smart City es una asociación público – privada centrada en la ciudad como laboratorio urbano con más de 40 proyectos centrados en datos abiertos, movilidad y mejorar la calidad de vida de residentes y visitantes.
• Viena: Tiene como objetivo que el 50% de su energía proceda de fuentes renovables.
• París le pone el foco a la movilidad compartida: 20.000 motos, 1.800 bicicletas y próximamente 3.000 vehículos eléctricos.

Aquí puedes conocer las 10 Smart Cities de Europa y las top 10 de Norte América

El desarrollo de las Smart Cities implica asumir y analizar un conjunto de tecnologías que faciliten el modelo de ciudad que se persigue. Pero hay unas tendencias que tenemos que tener presente y sobre las que hay que apalancar decisiones tecnológicas, decisiones de planificación de ciudad, pero también de interacción y de relación con la ciudadanía. Vamos evolucionando desde ciudadanía inteligente hacia usos donde la tecnología esté “incrustada” en diferentes aspectos de nuestro ecosistema.

Se evoluciona desde una tecnología que generó una ciudadanía 2.0 (redes sociales, intercambio de fotografías, comentarios, … digamos que es el momento “like”)

para dar paso a un entorno móvil en el que los dispositivos móviles son una extensión de la persona.

En primer lugar las tabletas y los smartphones pero tenemos que ir dando un paso más. Los iwatch están aquí y generará un nuevo contexto de interacción, de desarrollo de aplicaciones móviles y de nuevos modos de interacción con la ciudadanía. Y de modo complementario los “wereables” que nos ayudarán a estar conectados en diferentes formatos: desde complementos estéticos como we-tech hasta la ropa inteligente de las fuerzas de seguridad, de bomberos o de personal sanitario. Es decir, esta segunda fase corresponde a la “economía App”. Los siguientes pasos son analítica y la explosión del Big data junto con las soluciones cloud tanto a nivel empresarial como a nivel personal. El último paso de este camino, hasta la fecha lo configuran el Internet de las cosas

En el siguiente video se encontrará con reflexiones y puntos de vista muy interesantes para hacer que una cuidad sea un espacio de vida y relación más atractivo. ¡ Qué fácil parece todo en el vídeo !. La realidad es más compleja pero nos presenta unos principios de acción que si se tuvieran en cuenta y las ciudades nos lo comunicasen, nos lo recordasen podríamos ver nuestra ciudad con otros ojos. El video ¿Cómo hacer una ciudad más atractiva? pone el énfasis en los siguientes pilares:

• Ni demasiado orden, ni demasiado caos.
• Que haya vida. Que la vida esté visible.
• Compactar.
• Bien orientada, pero con pinceladas de misterio.
• Escalable
• Local

Fuente: http://labs.sogeti.com/download-new-vint-report-smact-city/