Todos los días escuchamos la importancia de la eficiencia energética y como debemos mejorar nuestros procesos para tener un menor impacto al medio ambiente, pues en este contexto hay un término que poco a poco va tomando protagonismo, se trata de las "smart city", una nueva forma de ver los grandes centros urbanos, y que hoy ya se esta abriendo camino en nuestro país.
Acá les dejamos una entrevista a Alex Bustos, Gerente de Ventas Mercado Cities Energy, de la empresa Schneider Electric.
¿Qué es una Smart City? Una Smart City es una ciudad verdaderamente eficiente, con un rendimiento optimizado de distintos sistemas, cada uno de los cuales es administrado de forma integrada para aprovechar de una mejor forma las inversiones, maximizar su valor y hacer más sustentable la vida para sus integrantes.
Una ciudad inteligente, a su vez, recorre con su comunidad un camino para ser más competitiva en cuando a talentos, inversiones y trabajo; logrando todo esto un aumento en la calidad de vida. Una ciudad debe adaptarse para ser un lugar agradable para vivir, trabajar y divertirse; enfocándose en los residentes y turistas por igual. También debe ser inclusiva y ofrecer oportunidades para todos sus habitantes, además de ofrecerles servicios innovadores, significativos y atractivos.
Al ser sustentable, una Smart City reduce las consecuencias ambientales de la vida urbana, sobre todo si tomamos en cuenta que las ciudades son las mayores emisoras de carbono con sus carreteras, espacios públicos y edificios que utilizan sus habitantes para trabajar, vivir y recrearse. Es necesaria una ejecución eficiente y sustentable de las operaciones en todas estas áreas para minimizar la huella ecológica de la ciudad.
¿De dónde nace el concepto? El concepto de ciudades inteligentes nace de una necesidad. En 30 años más, el 70% de la población mundial vivirá en ciudades, lo que generará el fenómeno de las megaciudades.
En este sentido, la disminución de emisiones de CO2, la calidad de vida y la buena distribución de los habitantes serán factores clave para poder convivir en estas grandes urbes. Las ciudades inteligentes vienen a solucionar todos estos dilemas, sacando el máximo provecho de la energía, a la vez que introduce el uso de las energías renovables y entrega armonía a cada componente urbano.
¿Cuales son las líneas de acción? Para que una ciudad se convierta en una Smart City existen cinco puntos clave:
- Establecer la meta y la hoja de ruta para llegar a ser una Smart City.
- Combinar soluciones de hardware y software para mejorar la eficiencia de los sistemas operativos urbanos.
- Fomentar la integración de las operaciones e informaciones para mejorar la eficiencia general de la ciudad.
- Impulsar la innovación y crear un modelo de negocio específico para cada ciudad.
- Conducir la colaboración entre los mejores actores, particulares, gobierno, privados tanto nacionales como internacionales.
¿De que forma podemos llegar a crear una smart city? Una Smart City o ciudad inteligente es por estos días más que una novedad tecnológica una necesidad real de vida en sociedad, pudiendo generarse mediante los siguientes aspectos:
- Adaptación y control de iluminación de calles
- Medidas de energía bidireccional (Net Metering)
- Automatización de subestaciones de electricidad, agua y gas
- Implementación de rutinas de eficiencia energética
- Fomento del transporte eléctrico
- Comunicación y control de electrodomésticos
- Gestión de activos
- Video Vigilancia
- Gestión de cortes y reposición de energía
- Previsiones meteorológicas
- Fomento y uso de energía renovables
- Control y administración de la demanda eléctrica
- Generación virtual de energía
- Monitoreo y control de la calidad de energía
- Gestión basada en los indicadores de proceso
- Almacenamiento de energía por nuevos y mejores medios
- Implementación de SCADAS (software de adquisición y control de datos) en la gestión
- energética.
¿Hay algún modelo de Smart City en funcionamiento y que sirva de referente? Lamentablemente, ninguna ciudad del mundo actualmente es una Smart City como tal ya que no existen parámetros estándares de medición. Sin embargo, hay muchas que han ido adoptando distintas soluciones en la búsqueda de ser una urbe inteligente.
Un ejemplo a destacar es Madrid, España, en donde se implementaron varias soluciones. Algunas de estas son un sistema de información del clima para el aeropuerto, manejo de aguas pluviales, sistemas de gestión de energía para edificios, sistema de control del tráfico en tiempo real en 739 intersecciones, control de acceso a la ciudad, entre otras soluciones.
Sin embargo, existen muchas iniciativas de Smart City en el mundo, pero son las grandes capitales las que suelen disponer de mayor capacidad financiera para abordar los proyectos necesarios para dotarlas de “inteligencia”.
Ejemplos destacados son Barcelona, Lleida, Tarragona, Málaga, Bari, Stockholm, Buzios, Dubai, Boulder, Columbus y Génova.
Todas las ciudades, sobre todo las que poseen una gran densidad poblacional, tienen el potencial para convertirse en una Smart City. Chile ya ha dado algunos pasos.
De hecho, Valparaíso ya dio un paso importante y actualmente tiene un sistema de gestión energética integrada y remota, el cual permite el análisis y la optimización de la red eléctrica.
Además, hoy Chilectra está automatizando las redes de distribución de media tensión de Santiago y está pronto inaugurará el primer prototipo de ciudad inteligente de Chile. Este proyecto se llama Smart City Santiago y está siendo implementado en la Ciudad Empresarial.
También en Punta Arenas, de la mano de la Universidad de Magallanes, algo se está avanzando en el tema.
¿Qué barreras enfrenta específicamente Chile para desarrollar este tipo de concepto en sus ciudades? Más que barreras hay desafíos por delante. El concepto Smart suele ser asociado a las grandes capitales, debido a que son éstas las que lo han implementado con más fuerza y actualmente hay ejemplos emblemáticos.
Sin embargo, las Smart Cities son una forma de vivir que puede ser replicado en cualquier asentamiento humano, ya que su objetivo es lograr convertirse en un lugar de residencia y trabajo que cuente con todas las condiciones para lograr calidad de vida, minimizando las emisiones de CO2. Por lo tanto, en cualquier lugar de Chile podría implementarse.
Para que nuestras ciudades se conviertas en verdaderas Smart Cities, existe el desafío de que las grandes instituciones públicas y privadas, sobre todo de servicios, adopten este sistema. Sólo de esta forma serán una ciudad del futuro, convirtiéndose en urbes más sustentables, eficientes y otorgando una mejor calidad de vida a sus habitantes.
¿Qué papel juega Schneider Electric en el proceso de la Smart City? Ponemos al servicio del mercado nuestra experiencia a la hora de mejorar las infraestructuras de las ciudades en todo el mundo, desde las más maduras en las zonas desarrolladas hasta aquellas que están en proceso de crecimiento en las regiones emergentes. El resultado es un mayor nivel de eficiencia a nivel global en la ciudad y mayor calidad de vida para sus habitantes; esto es, ciudades más habitables y sustentables.