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Smoothie de Frambuesas: receta sana y ligera

Por Decoratualma
ás narración que diálogo, pero el lenguaje sencillo hace que no resulte pesado de leer en ningún momento. Éste es uno de los puntos a favor de Martínez de Lezea: sabe retratar una época historia y enseñarnos sobre ella de manera muy amena. Además, logra que te metas de lleno en la historia y te sientas como si fueras un personaje más, no parece un resumen de los hechos como ocurre con otros autores. Se puede decir que Toti sabe novelar y profundizar donde hace falta para obtener un buen libro como resultado.

En lo que se refiere al contenido, es de admirar la cantidad de historias que suceden y lo bien entrelazadas que están todas ellas. Ningún personaje aparece en vano y cada uno tiene su papel. El libro me enganchó y me tuvo atrapada hasta el final, nunca se acaban los acontecimientos, hay acción constantemente y su historia no es en absoluto simple. Creo que, de Toti, es de los libros que más acción tiene. Me recuerda un poco a La calle de la judería en este aspecto, pero a diferencia de ésta, Los hijos de Ogaiz no es una saga familiar, sino que todos los acontecimientos se centran en una sola generación de personajes, que me parece una ventaja, porque ya comenté en La calle de la judería que a pesar de las numerosas acciones que se sucedían era difícil llegar a profundizar en los personajes si continuamente pasaban las generaciones y los protagonistas cambiaban. Para que os hagáis una idea de todas las historias que contiene, el libro sólo tiene 350 páginas pero al terminarlo me sentí como si hubiera leído uno de más de 700.

Pero no os penséis que por tener mucha acción el libro pierde en sentimientos, porque estos están siempre presentes en todas las historias. Aquí hay de todo, y nada deja indiferente al lector: amor (entre Ane y Roger, entre otros), odio (entre las dos mujeres, Oneka y Aldonza, y hacia aquellos que destrozaron la familia de Orti y de Daniel), deseo de venganza (por parte de Orti y Daniel), ambición (de Aldonza y su hijo), amor a la familia (de todos los Ogaiz que desean reencontrarse), bondad y valent

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