Algunas empresas se cuestionan si merece la pena asignar una parte de su presupuesto a servicios de Social Media. Saben que su negocio debe estar en internet, pero siguen pensando que contratar estos servicios es más un gasto que una inversión.
Analicemos qué implicaciones tiene para la empresa delegar la gestión de Social Media.
Ahorro de recursos
El empresario se ahorra tener que hacer un hueco en su agenda para crear contenidos, diseñar estrategias y preocuparse de llevarlas a cabo. Además también se ahorra el tiempo que requiere formarse para saber cómo funcionan las redes sociales, cómo interpretar los resultados y cómo actuar ante cualquier incidencia, entre otros. En cualquier caso, contratar un especialista en Social Media permite al empresario emplear su tiempo en otras tareas que domina y que forman parte de la actividad de su empresa.
Valor añadido de los servicios de Social Media
La gestión de estos servicios por parte de un profesional da un valor añadido a la marca des del primer momento. Desde que crea los perfiles sociales, el blog o una campaña publicitaria, el especialista abre nuevas vías de comunicación directa con el cliente y crea imagen de marca. El producto o servicio objeto de negocio, pasa a ser más valorado por los clientes por su accesibilidad y, por tanto, aumenta las oportunidades de venta. Por otra parte, la empresa recibe información valiosa acerca de los gustos del cliente, que da pie a adaptar el producto a las exigencias del mercado y, nuevamente, aumentar las posibilidades de venta.
Beneficio económico del gasto de Social Media
Basta que la empresa tenga los objetivos claros, para saber cuán rentable están siendo los servicios contratados. El especialista sabrá utilizar las herramientas adecuadas para medir el ROI o retorno de inversión, derivado de la gestión Social Media. Por tanto, si el beneficio económico es medible, es evidente que contratando un profesional, la empresa controlará la rentabilidad de su presupuesto. Contratar un profesional tiene un coste, es cierto, pero si el resultado es que la empresa aumenta su visibilidad y crea oportunidades de negocio, el gasto pasará a ser una inversión. La consecuencia más evidente serán los beneficios económicos que se deriven de los servicios de Social Media.