Revista Cine
La excusa del bullying sirve para dejar caer una más de fantasmas vengativos que asesinan estúpidos adolescentes sin ton ni son. Podría tener su gracia si la realización no fuera tan pedestre, los actores no sobreactuaran o el guion lo hubiera firmado alguien con algo de imaginación. Hay sangre en abundancia pero su presencia no logra evitar que haya momentos cómicos que pretendían ser aterradores, con pausas de pacífico aburrimiento que provocan ronquidos generalizados en la sala de exhibición. El “slasher” anda de capa caída, y encima algunos se empeñan en darle una muerte poco digna y más dolorosa que las vistas en cualquier producción del género.Puntuación @tomgut65: 3/10