Son las encuestas una estafa?...

En la región Lima una "encuestadora" al candidato regional X1 le da 28%, la otra le da al mismo candidato 15% y la tercera le pone 5% al mismo X1. ¿A quién creer?El voto generalmente es emotivo. El Presidente norteamericano Bill Clinton para ganar la reelección bailó y utilizó "La Macarena" como música de campaña electoral del Partido Demócrata. En Italia la actriz porno llona Staller, más conocida como "Cicciolina", exhibiendo los pechos fue electa parlamentaria. Fujimori y Alan García también triunfaron electoralmente subiéndose al estrado y bailando como adolescentes con ceñidos polos multicolores.La música, la danza y los muñecos (mascotas) son una forma ingeniosa de conquistar el voto popular confundiéndose con el pueblo, haciéndose semejante a él y adoptando sus costumbres que al final todo es pura pantomima o actos fingidos.Muchas personas se dejan influenciar por la campaña electoral y votan por ciertos candidatos por el simple hecho que les caen simpáticos, aunque no estén lo suficientemente preparados para gobernar. Este tipo de manipulación de la voluntad popular es permitida dentro del libre juego democrático, debido a que le da facultad para que el ciudadano dentro de su percepción escoja qué opción le parece la más conveniente.Una cosa es ser un "candidato encubierto", un aventurero de fama y fortuna, pero otra cosa es ser un burdo estafador, un vulgar delincuente manipulador de la conciencia ciudadana por medio de encuestas falsas o encuestas con resultados súper alterados.Este andamiaje de mentira y de manipulación es fácil ponerlo al descubierto y desenmascararlo, ya que los resultados que publican las "encuestadoras" que cuentan con aval del JNE son diametralmente distintos, con diferencias abismales.En la región Lima una "encuestadora" al candidato regional X1 le da 28%, la otra le da al mismo candidato 15% y la tercera le pone 5% al mismo X1. ¿A quién creer?. Científicamente el margen de error debe ser un 2% y en ese sentido los resultados de todas las encuestadoras deben coincidir con márgenes de diferencias tolerables y aceptables.Lo más criticable y grotesco es que en Lima provincias las "encuestadoras" aparentemente, no sólo venden sus resultados al mejor postor, sino que encima contratan en los diarios páginas a full color sin ningún auspiciador o anunciante, convirtiendo a las encuestas en instrumentos de manipulación.Son pocos los que analizan los resultados de las encuestas, dándose cuenta de la burda manipulación. La mayoría escucha radio o corre a los puestos de venta para comprar su diario y ver quiénes están primero. Ya no meditan en la persona, ni en sus propuestas, simplemente quieren saber quién va a ganar para subirle luego al "carro de los vencedores".De nada sirve que se hagan debates públicos, que los candidatos se amanezcan repasando sus planes de gobierno, la legislación electoral y las normas de los gobiernos regionales y municipales, y que tengan una actuación brillante en la polémica con sus competidores, cuando de pronto sale publicada una encuesta que le da primer lugar al candidato que no asistió o al que hizo el ridículo en pleno debate.De toda esta manipulación asqueante las víctimas al final somos todos los ciudadanos de Lima provincias, ya que un patán o un incapaz al final termina sentándose en el sillón regional o sillón municipal, lapidando nuestras aspiraciones de desarrollo y de gozar de una ciudad limpia, segura y ordenada.