Ya estoy de vuelta de las vacaciones, han sido largas, pero se me han hecho muy muy cortas, el ir a España, esté el tiempo que esté, siempre me sabe a poco.
Aunque no haya subido recetas al blog, he seguido cocinando, y una de las recetas que hice en las vacaciones, fue esta sopa fría.
La hice para variar un poco, y no estar comiendo todos los días salmorejo y gazpacho, aunque para mí un verano sin gazpacho, no es un verano como Dios manda ;)
La sopa la he bautizado Thai, porque lleva ingredientes típicos de esa cocina, la leche de coco, el jengibre... y la verdad que está muy rica y que además la podemos hacer igual en invierno, pero en versión caliente.
El jengibre y la leche de coco les da ese punto exótico, que suele sorprender a la gente, si la hacéis como entrante en una cena, así más currada, pues podéis hacer toda la receta tal cual, con las florituras de los aros y demás, sino, hacer la sopa y listo, que es rápido y fácil.
Sopa thai fría de zanahoria
Ingredientes:
500 gr de zanahorias (sin pelar ni nada)
1 patata (apróx. 200 gr)
1 cebolla (apróx. 170 gr)
6 gr de jengibre fresco (sino encontráis podéis utilizar en polvo, una media cucharadita)
1 lata de leche de coco (400ml)
Cayena al gusto
Sal
Para la guarnición:
Chili o guindilla roja
Cilantro fresco
Queso feta (o algún queso "saladete")
Tortillas (tipo burrito)
Aceite
Para la sopa:
Ponemos al fuego una cacerola con 1 litro y medio de agua con una cucharadita de sal.
Pelamos las zanahorias, la patata y la cebolla, lo partimos en cachos grandes y lo echamos en la cacerola cuando el agua esté hirviendo.
Dejamos que cueza una media hora, o hasta que todos los ingredientes estén blandos.
Sacamos los ingredientes del agua y lo pasamos a un bol amplio, reservando el caldo.
Echamos la leche de coco, el jengibre, la cayena y trituramos con la batidora, añadimos 100 ml de caldo y sal (apróx. 1/2 cucharadita).
Dejamos que se temple y la metemos al frigorífico para que se termine de enfriar.
Para la guarnición:
Precalentamos el horno a 200ºC.
Pintamos las tortillas con aceite por los dos lados, cortamos en tiras de unos dos dedos de grosor y enrrollamos sobre unos círculos de metal (los que utilizamos para emplatar) y lo metemos al horno hasta que estén bien dorados.
Sino tenéis círculos de emplatar, podéis recortar la tortilla con la ayuda de un vaso y hacer círculos planos, como mini tortillas.
Picamos el resto de la guarnición y emplatamos a lo loco.
Espero que os haya gustado mi receta de vuelta de las vacaciones!! Y disfrutar de las vuestras si seguís! ;)