Se ha presentado Sortu, la evolución del mundo abertzale para poder estar en las próximas elecciones de Mayo. Es una candidatura "limpia" del veneno que podría hacer que fuera proscrita atendiendo a la ley de partidos. Las declaraciones medidas, su condenar la violencia sin pedir la disolución ni dejar en mal lugar a ETA, y la terrible sensación, subjetiva pero real, de que esto "ya lo he vivido" me hace albergar dudas.No cabe duda que los pasos dados por ETA y el mundo abertzale si no históricos si son singulares, el alto el fuego, el desmarcarse el mundo político del de la violencia marcan un punto de inflexión; pero el paso subsiguiente, la creación de una marca política aceptable que evite la justificación de la violencia como argumento público no se ha dado del todo ó se ha dado de una manera tan medida que suena a poco por mucho que su presentación en Madrid tenga imagen de proceso internacional.Como decía en uno de sus ensayos el desaparecido Mario Onaindía en el País Vasco tiene tanta importancia el ser como el parecer y aunque los pasos dados parece que sin duda un avance la realidad es que los pasos son más dialécticos que prácticos. Los comunicados y acciones de ETA no dejan de ser un juego de malabarismo dialéctico para "parecer" que se dice una cosa y dejar paso, en caso de necesidad, a la contraria. En este juego de apariencias y esencias es donde estamos, parece un cambio diametral y, realmente, son solo gestos como los muchos que se han andado y, después, desandado.Ignoro si Sortu será ilegalizado finalmente, sus estatutos están en manos de los fiscales, pero de lo que no cabe duda es que los más radicales deben estar muy ahogados si dan este paso para, después, volver a las andadas de buscar "un algo" que eluda la eficente acción de la justicia. También pudiera ser, en clave de optimismo, que fuera el inicio de un camino de diez mil kilómetros.El gobierno, la oposición y casi todo el mundo excepto los nacionalistas vascos y el propio lehendakari, creen que el paso es escaso, escuálido para lo que se pide "a cambio": la presencia política y en las instituciones.La muerte social, anoxia política, de su extrañamiento hace daño a ETA y a su mundo, les hace extranjeros de la vida del País Vasco, les lleva a la obliteración histórica del "grapizarse" y ante eso y la presión social solamente se abre una vía: la política. Empero la vía política debe ser sin paso atrás, sin que ETA tenga argumento para la vuelta atras: para rearmarse o extrorsionar, aunque ETA sigue haciendo captación y sigua robando vehículos. En ese punto decisivo y sin vuelta atrás es donde podrá tener acomodo que esas ideas antes sostenidas con la bala y la explosión puedan defenderse con la voz y las razones. La violencia de ETA inhabilita gran cantidad del discurso medido de Sortu.Todavía pesa demasiado en todos el pasado, las añagazas y revueltas retóricas de otras ocasiones, sin embargo este momento, el del "verdadero cambio" de la perestroika de ETA en algún momento habrá de llegar. Ignoro si la apariencia que denuncio en este caso es el espejismo que es heraldo de la verdad o sólo es una nueva estratagema.Sería triste llegar tarde o no llegar a ese momento pero, sin embargo, sería demasiado ingenuo creer sin más en el mundo del hacha y la serpiente: siempre ha mordido y ha cortado al que se le ha acercado. Por eso pido como San Agustín: ver para creer, y para ver es necesario tiempo, más del que hay de ahora hasta los comicios de Mayo.Futuros con dudas. Recuerdos del día de mañana.
Despierte el alma dormida, avive el seso e despierte.
A fin de cuenta sino pensamos y vivimos para que queremos estar.
Los pensamientos de hoy son recuerdos del mañana que tenemos hoy.