¿Soy hipocondriaco? Síntomas y soluciones de la hipocondria

¿Qué es la hipocondría?

La hipocondría es una enfermedad que padecen aquellas personas que creen continuamente que sufren alguna enfermedad grave. La característica principal del hipocondriaco es la preocupación y el miedo de padecer una enfermedad a partir de la interpretación personal de una sensación corporal.

La característica central de este grupo de problemas es la presencia de síntomas físicos para los que las investigaciones médicas no encuentran una explicación clara y determinante. Las molestias que explican los pacientes tienden a ser variables y generalizadas. El dolor y dificultades respiratorias son los síntomas más generalizados.

¿Cómo intentan los pacientes solucionarla?

Los pacientes intentan encontrar soluciones, siendo varias las que aplican en sus vidas diarias. Suelen buscar información médica tranquilizadora o evitar situaciones que les generen estrés. Esta búsqueda constante de tranquilidad se ha considerado como un comportamiento compulsivo. En algunos casos, se utilizan psicofármacos inicialmente para controlar los síntomas ansiosos tan importantes que padecen estos pacientes.

También se puede utilizar una terapia psicológica cognitivo-conductual, en la que se promueve la pérdida de la angustia y el miedo a la enfermedad que el hipocondríaco siente. Es muy importante el papel que juega la familia del paciente, ya que ha de entender que tiene un problema real, para apoyarlo y ayudarle a mejorar. Finalmente, se trabaja para que el paciente pueda enfrentar con éxito otros problemas que aparecen en su vida cotidiana: toma de decisiones difíciles, cambio de trabajo, etc.

¿Nuevas soluciones y aportaciones?

En la actualidad existen muy pocos estudios con resultados significativos que den respuesta y sirvan de ayuda a las personas que padecen este problema. Un estudio realizado con la Universidad de Oviedo ha sacado a la luz diferentes aspectos a tener en cuenta a la hora de encontrar solución al problema.

El papel que el médico juega como persona de confianza del paciente es clave y central. Aportar una explicación simple de los síntomas experimentados y dar reaseguramiento acerca de la ausencia de gravedad de los mismos es una de las estrategias psicoterapéuticas más extendidas de la práctica médica.

No obstante puede ocurrir que el paciente no confíe en el médico, por lo que se están haciendo grandes esfuerzos desde la terapia conductual para ofrecer unas pautas de tratamiento que sean eficaces. Sin embargo, la ausencia de controles en lista de espera o de estudios controlados, impide considerar a éste como un tratamiento bien establecido.

La solución de índole terapéutica propuesta tiene como eje central modificar lo que el paciente interpreta de manera exagerada al percibir cambios en su organismo. De este estudio realizado con pacientes hipocondríacos se han extraído una serie de conclusiones, de las que cabe destacar:

a)   La terapia cognitiva es eficaz y tal eficacia no es influida por las características de un terapeuta particular.

b)   La respuesta al tratamiento es rápida.

c)   Los efectos del tratamiento tienden a mantenerse tras su finalización.

d)   A pesar de ello, en algunos aspectos se aprecia un empeoramiento en el seguimiento, lo que sugiere la necesidad de mantener entrevistas de seguimiento a largo plazo.

La hipocondría es un problema real, en el que cada vez se dedican más esfuerzos y estudios para dar con una solución eficaz. De esta manera cada uno de nosotros tenemos la responsabilidad de ayudar a personas que sufran este problema, recomendándoles ayuda médica que le haga mejorar, para preocuparse cada vez menos, y hacerle ver el lado positivo de los diferentes aspectos de sus vidas.