Revista Cocina
Cuando veáis esta receta, vais a pensar: "¡anda ésta!, ¡que se va a lucir con la sopa!" "¡tanto nombre para esto!".
Pues bien, si la probáis, comprobaréis lo rica, lo fresquita, y lo buena que es para la sed en esos días de calor insoportable del verano, sobre todo, del verano manchego.
De ahí el nombre que le tenemos en mi casa: sopa fría de pepino, aunque en el título sólo puse sopa de pepino español, hace mucho que no hablo alemán y se me está olvidando!. La verdad es que es una pena, es un idioma muy bonito.
Pero sigamos con la receta. Es muy sencilla de hacer, nada trabajosa, cómo a mí me gustan las cosas en la cocina. Rápidas, sencillas, cómodas y con consistencia.
Yo la preparo minutos antes de comer, la meto en la nevera y la tomo de postre. El hielo se lo añado al final, cuando la saco de la nevera.
Es ideal para quienes hacen dieta. Y sólo lleva pepino. ¡PEPINO ESPAÑOL!.
Esta receta se la dedico a los agricultores. Ellos son los que más trabajan, los que más pierden cuando toca perder y los que menos ganan cuando toca ganar!.
Es una iniciativa de Ángel para apoyar de alguna manera a nuestros productores, así que, aquí va mi cibergranito de arena!
Ingredientes para un alemán:
1 Pepino
1 cucharada de Vinagre
1 cucharadita de te de Aceite de Oliva Virgen Extra (como quien dice 3 gotas)
Una pizca de sal
Hielo
Medio vaso de agua (como mucho medio vaso, no os paséis)
Preparación:
Se pela el pepino, se corta en dados y se echa en un plato.
Se añade una cucharada de vinagre (yo prefiero no echar más), la sal y el agua hasta que se llene el plato.
Se guarda en la nevera hasta la hora del postre.
Cuando lo saquéis, le echáis unos cubitos de hielo.
Consejo:
No echéis más agua de la que os he dicho. Yo siempre la echo a ojo, puede que incluso sea menos de medio vaso.
Aunque sean ingredientes para un alemán, la he publicado, pensando en vosotros!. Si, en tí y en tí y en ti y en tí, también!
Y no olvidéis que cuanto más fría esté, mejor!!!
También podéis ver mi otra receta con pepino.