CIUDAD ANTIGUA DE SALONA
Basílica. Ciudad antigua de Salona
A 14 kilómetros de Split, junto a la ciudad de Solin, encontramos Salona, el yacimiento más importante de Croacia. La antigua Salona fue una ciudad grande e importante, tres veces el tamaño de Pompeya. Primero fue una colonia griega y posteriormente los romanos la convirtieron en capital de la provincia romana de Dalmatia. La ciudad fue abandonada durante los ataques de los eslavos que procedían del centro de Europa y sus habitantes se refugiaron en el interior del Palacio de Diocleciano en la actual ciudad de Split.Lamentablemente, las ruinas de Salona se encuentran en un estado de conservación bastante deplorable, la información es escasa y todo el conjunto arqueológico presenta un aspecto de abandono.Antes de pasar por taquilla se pueden ver los restos de una antigua basílica y unos magníficos sarcófagos de mármol ricamente esculpidos.Basílica. Ciudad antigua de Salona
La entrada se paga en una caseta donde hay una pequeña sala-museo que conserva algunos fragmentos de mosaicos y donde se explica la historia de las excavaciones.
Leyendo los carteles explicativos intentamos ponerle imaginación al lugar. Destacaría el anfiteatro, la Puerta Caesarea, los restos de muralla y los cinco puentes que canalizaban el agua de la ciudad.
Ciudad antigua de Salona
El anfiteatro se construyó en el siglo II dC como parte del sistema defensivo de la ciudad. Tenía una capacidad para 15.000 espectadores y en su arena perdieron la vida los primeros mártires cristianos, entre ellos el obispo de Salona, Domnio. A principios del siglo V, las luchas entre gladiadores se prohibieron pero continuaron las peleas con animales. Muy cerca, había un cementerio donde se enterraba a los gladiadores muertos en la arena. Se conservan tan sólo algunas partes de la estructura y algunos fragmentos de la decoración escultórica. En el siglo XVII durante las batallas contra los turcos fue cuando sufrió mayores daños, ya que los venecianos lo demolieron por razones estratégicas, concretamente para evitar que los turcos lo utilizaran como fuerte.Anfiteatro. Ciudad antigua de Salona
Anfiteatro. Ciudad antigua de Salona
La Puerta Caesarea era una monumental puerta construida bajo reinado del emperador Augusto. Estaba formada por grandes bloques de piedra local cortados de forma regular, con la técnica conocida como opus quadratum. Por la parte exterior, la puerta estaba flanqueada por dos torres octogonales. A medida que la ciudad fue creciendo, la Puerta Caesarea fue perdiendo sus funciones y permaneció como una especie de arco de triunfo en el centro de Salona.
Puerta Caesarea... como era
Y lo que queda de ella
La muralla se construyó a lo largo de varios siglos. La parte más antigua de la ciudad, urbs vetus, tenía forma trapezoidal y ya estaba rodeada por una muralla. Durante el período de paz, Salona fue ampliándose progresivamente por fuera de la muralla. Posteriormente y tras las constantes incursiones de tribus germánicas se amurallaron los nuevos barrios y se fortificaron con alrededor de cien torres rectangulares. El anfiteatro se incorporó también dentro del sistema defensivo y la muralla se extendió desde el anfiteatro en el oeste, hasta la Puerta Andetria al Noreste, configurándose la forma elíptica de la ciudad, a diferencia de su forma trapezoidal inicial. La muralla tenía una longitud que superaba los 4 kilómetros y sus paredes tenían una anchura entre 1.9 a2.5 metros. A lo largo de los años, la muralla se reparó en múltiples ocasiones. Durante el reinado del emperador Teodosio II, se reconstruyeron todas las torres. En la primera mitad del siglo VI cuando Salona fue conquistada por el ejército bizantino, se empezaron a reparar las paredes de la muralla para aumentar la seguridad.
Restos de la muralla
Los cinco puentes: Ya fuera de la muralla que rodeaba la ciudad antigua -urbs vetus- la principal vía de comunicación pasaba por la Puerta Caesarea y se dirigía hacia el Este atravesando uno de los brazos del río Salon. Bajo la calle se construyeron unos arcos de piedra conocidos como los cinco puentes.Cinco puentes
Sin prisas, en una hora y media vimos todo el recinto. A pesar de su estado de abandono, nos resultó agradable pasear entre piedras históricas, viñedos, higueras y con las macizas montañas calcáreas de fondo donde se puede ver en lo alto la Fortaleza de Klis que sería nuestra próxima visita.Fortaleza de Klis a lo lejos, desde Salona
Precio: 30 kunasFORTALEZA DE KLISKlis es un recinto medieval construido sobre la ciudad croata de igual nombre. En el siglo IX el príncipe Mislav fijó allí la sede de su trono y desde entonces varios reyes croatas siguieron su ejemplo. Geográficamente se encuentra entre las montañas Mosor y Kozjak, y fue un lugar estratégico para la defensa de Dalmacia contra los otomanos. El asedio turco duró más de veinte años y finalmente los otomanos ocuparon la fortaleza en 1537, por lo que representa un símbolo de resistencia para el pueblo croata. En 1669 fue tomada por la República de Venecia, cuando se restauró y amplió.En cuanto a las ruinas, igual que en Salona está todo muy dejado … una basílica reconstruida, cañones, torres de vigilancia y la bandera croata ondeando en el punto más alto de la fortaleza.
Lo que sí merece la pena son las vistas, lástima del día gris que tuvimos pero en un día despejado deben ser magníficas.
A los pies, el pueblo de Klis
Precio: 20 kunasSPLITSplit es la principal ciudad de Dalmacia y la más importante del Adriático además de la segunda ciudad del país después de su capital Zagreb. Situada entre el mar y la montaña, su conjunto es espléndido, ya sea desde algún punto elevado o visto desde el mar.Veli Varoš: Se trata de un barrio tradicional. En la Edad Media es donde vivía la clase humilde, pescadores y agricultores, que no disponían de suficientes recursos para alojarse en el interior del Palacio de Diocleciano. Hoy es un barrio muy pintoresco de casas tradicionales, muchas de ellas arregladas para alquilar a los turistas. En Veli Varos, alquilamos un apartamento y estuvimos de maravilla. Bajando las escaleras (foto inferior) en nada te plantas en el centro.
Colina de Marjan: Con una altitud de 174 metros es un excelente mirador de la ciudad.Paseo marítimo: Su nombre completo es Obala hrvatskog narodnog preporoda más conocido como la “Riva”. Paseo muy agradable, lleno de restaurantes, cafeterías, heladerías, y música en vivo con actuaciones de folclore tradicional croata. Es un lugar ideal para pasear a última hora de la tarde aprovechando la brisa del mar y el buen ambiente. Siguiendo la Riva se llega al puerto desde donde salen tanto los ferrys internacionales como los que van a las diferentes islas cercanas. En uno de los extremos se abre la gran y bonita plaza porticada de la República, Trg Republike.
Plaza de la República. Split
Plaza de la República. Split
Palacio Diocleciano: Sin duda la parte más visitada y admirada de Split. Es uno de los monumentos romanos más importantes que se conservan en la actualidad. Diocleciano fue un soldado nacido en Salona -actual Solin- y se convirtió en un destacado emperador de la última época del Imperio. Mandó construir el palacio cerca de su lugar de origen pensando en su retiro.Lo que fue el recinto de aquel gran palacio de tres hectáreas, es ahora un auténtica ciudad dentro de la ciudad. Tal como he comentado anteriormente, cuando se abandonó Salona en el año 614, sus ciudadanos se refugiaron tras las murallas del palacio y fundaron la ciudad de Spalto, la actual Split. Construyeron sus casas, de tal manera que hay unos 220 edificios en los que sus habitantes viven entre piedras milenarias y obras de arte combinación de estilos medieval, renacentista y barroco dentro del gran recinto romano.Catedral de San Domnius y mausoleo de Diocleciano
Viviendas en el Palacio
Viviendas en el Palacio
Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979, por ser considerado un excepcional ejemplo de arquitectura romana en la costa Adriática.Construido en piedra calcárea y mármol, tiene una forma rectangular irregular. Está amurallado excepto por la parte de la fachada sur que da al mar y tiene 16 torres repartidas en todo el recinto de muralla y 4 puertas, una en cada fachada. Las puertas tienen nombre de metal: Puerta de oro, de plata, de hierro y de bronce. Ésta última es la que da a la fachada marítima, es la más pequeña y se utilizaba para entrar las mercancías y por donde el emperador tenía acceso a las embarcaciones.Iniciamos nuestra visita entrando por la Puerta de Bronce y caminamos por las salas subterráneas, un largo recinto abarrotado de puestos de bisutería y artesanía. Al final, unas escaleras por donde se accede al Peristilo, la entrada ceremonial a las estancias imperiales. La parte mejor conservada es el vestíbulo, donde se puede ver una gran cúpula a cielo abierto que nos recordó la del Panteón en Roma. En la plaza se levanta la Catedral de San Domnius, antiguo mausoleo de Diocleciano con su elevada torre románico-gótica. Al este y de forma octogonal, el propio mausoleo. Toda esta zona del Peristilo es muy interesante visitarla también de noche, las iluminaciones le dan un aire distinto.
Peristilo
Peristilo
Al oeste había tres templos de los cuales queda solamente el Templo de Júpiter convertido en el Baptisterio de San Juan, precedido por una esfinge egipcia de granito negro.
Templo de Júpiter
Por la Puerta de Hierro se sale a la Narodni Trg, conocida como Pjaca, es decir, “la Plaza”. Se trata de un gran recinto rodeado de bellos edificios y muy buen ambiente. Cenamos en la misma plaza, en una cafetería-restaurante que tiene más de 200 años de antigüedad.
La Plaza
La Plaza y a la derecha, la Puerta de Hierro
A través de la Puerta Dorada, la más monumental de las cuatro, salimos delante de la estatua gigante de casi 8 metros de altura de Grgur Ninski (Gregorio de Nin), obispo de Split. Es obra del escultor croata Iban Mestrivić y cuenta la leyenda que quien le toque el dedo gordo del pie tendrá buena suerte. Originalmente estaba delante de la Catedral, en el centro del Peristilo, pero durante la ocupación fascista en 1941 se retiró y posteriormente, en 1954 se colocó en el lugar actual.
Puerta Dorada
Pie de Gregorio de Nin
Gregorio de Nin
Si salimos por la Puerta de Plata nos quedará muy cerca el mercado de frutas y verduras.
Puerta de Plata
Lo más interesante es dejarse llevar por las laberínticas callejuelas del Palacio de Diocleciano donde encontraremos monumentos de gran valor, calles medievales encantadoras llenas de diminutas tiendas, impresionantes casas, acogedores restaurantes, música en vivo, romanos a la espera de que algún turista quiera posar con ellos a cambio de unas monedas, museos … y mucho ambiente, tanto turistas como jóvenes locales que parecen tener en el Peristilo un punto de encuentro.
Otro rincón bonito fuera del Palacio pero junto a su muralla son las plazas Trg braće Radić y Voćni Trg, justo donde se encuentra el Kastel, una de las torres del recinto amurallado.
Kastel
Para pasear e ir de compras, el mejor lugar es la Calle Marmontova, perpendicular a la Riva. Es una elegante calle donde encontraremos todas las marcas de ropa. Al final de la calle se abre la Trg Gaje Bulata, plaza en la que destaca el edificio del Teatro Nacional.Calle Marmontova
Original fuente en la Calle Marmontova
Si sois de visitar mercados, en la misma calle Marmontova se encuentra el mercado de pescado.
Split nos sorprendió y nos enamoró. Es una de esas ciudades de la que quizás no nos esperábamos demasiado, posiblemente porqué no me acababa de imaginar como era eso de una ciudad dentro de un palacio, pero con mucho gusto nos hubiéramos quedado unos cuantos días más. Espero volver algún día.