Y el mundo se paraliza cuando la saga Star Wars estrena algo nuevo. Muchos años se pasaron los fans con el consuelo de revisionar los títulos clásicos, pero desde que la maquinaria mercantil se volvió a poner en marcha (más aún con “tito Disney” detrás de la franquicia), se convierte en un evento planetario, que diría aquella, invadiendo no solo las pantallas de cine, sino las cartas de Sus Majestades de Oriente.
Los últimos Jedi viene con la intención de revitalizar el espíritu políticamente activo y rebelde de la historia, eso sí, sin cambiar un ápice los patrones. Ello nos deja la sensación de pasarlo realmente bien y a la vez de que lo estamos haciendo por asistir nuevamente a la misma historia que ya se nos ha contado una y otra vez: luz, oscuridad, rebeldes acorralados que deben reagruparse para resurgir de las cenizas. Algún guiño hacia aquellos de origen más humilde (ya lo entenderán) y el escenario de una Las Vegas de otro planeta donde se venden armas tanto a "buenos" como a "malos" le dan un ligero toque del siglo XXI.
Con visible respeto, la nueva entrega de la saga centra la atención en los últimos coletazos aventureros de leyendas como Luke Skywalker y Leia Organa, además de los droides clásicos, para que hagan de nexo con las nuevas generaciones de jovencitos que están destinados a ocupar sus puestos en la franquicia, obteniendo así el ansiado (y rentable) futuro continuista.
Así las cosas, esta película dejará con el cuerpo un poco raro a los seguidores veteranos, que se irán oliendo el "plan renove", aunque pueden apuntarse al carro y no abandonar el barco, porque a fin de cuentas se trata de lo mismo con caras nuevas. A los "starwarseros" de nuevo cuño, sin embargo, les gustará casi empezar de cero e identificarse con los personajes que están destinados a cortar el bacalao en un futuro casi inmediato. Ley de vida, supongo. Yo me declaro desde hoy, eso sí, simpatizante oficial del denominado "sucesor de Darth Vader", que lo que ansía es que todos los bandos se vayan a esparragar y comenzar, por supuesto bajo su mando, de cero. Poco futuro le auguro sin embargo a semejante osadía. Nuevamente, ley de vida…
Algún que otro cameo o aparición inesperada y un entorno muy poderoso en lo referente a los efectos digitales (los mejores y mejor pagados no defraudan) harán de la cita con los personajes que creó George Lucas nuevamente un espectáculo difícil de igualar.
Cabe resaltar que en este ejercicio nostálgico, lógico e incluso necesario (lagrimilla) de dejar el testigo a los que pisan con más energía, el único que parece resistir el paso del tiempo es el ya gigante John Williams (este caballero sí que es leyenda), que vuelve a hacer con la banda sonora un trabajo brillante y cargado de reconocibles matices. ¡Que la Fuerza le acompañe mucho tiempo!, que será bueno para el espectador.
Dirección: Rian Johnson. País: USA. Duración: 150 min. Intérpretes: Daisy Ridley, John Boyega, Adam Driver, Óscar Isaac, Mark Hamill, Carrie Fisher, Domhnall Gleeson, Benicio del Toro, Laura Dern, Gwendoline Christie, Kelly Marie Tran, Lupita Nyong'o, Anthony Daniels, Andy Serkis, Warwick Davis. Guión: Rian Johnson, basada en los personajes de George Lucas. Género: Ciencia ficción. Fantástico. Aventuras. Música: John Williams. Fotografía: Steve Yedlin. Estreno en España: 15 diciembre de 2017.