La mejor noticia de este domingo nos la ha dado Ruiz Gallardón. El que fuera alcalde de Madrid, en la actualidad Ministro de Justicia, ha declarado que "la malformación del feto no será razón para abortar". Opina que hay que dar el mismo nivel de protección a un feto sin minusvalías que a uno que presente algún tipo de anomalía. La legislación actual (de plazos) volverá a un sistema de supuestos, que no será el mismo que estaba vigente antes de la ley actual.
La actual regulación de la interrupción del embarazo establece el aborto libre hasta la semana 14 y hasta la 22 en caso de riesgo de la vida o la salud de la mujer o graves anomalías en el feto, y sitúa en 16 años la mayoría de edad para adoptar la decisión. Gallardón afirma que la legislación volverá a un sistema de supuestos "que no será exactamente el que estaba vigente con anterioridad a la ley de plazos". Hay que dar el mismo nivel de protección a un concebido
sin ningún tipo de minusvalía o malformación, que a aquel del que se
constate que carece de algunas de las capacidades del resto de
concebidos.
Un revés serio para el abortismo rampante, y un Sí a la vida, sin discriminación de ningún tipo.