Y de madrugada llega el sueño. Los personajes toman posiciones alrededor de mi cama. Grandes lienzos cubren las paredes. El decorado consta de: un cielo sucio, lejano y un parque en cuyo centro se exhibe La Esfinge. El tocado de plumas subraya su importancia. Las líneas de fuga escapan hacia un punto oculto pero existente: su corazón. Ella mira al infinito. Es una pose, probablemente esté ciega. Se diría que detenta el poder, pero solo es un icono
Revista Cultura y Ocio
Por Urbana Luna
Y de madrugada llega el sueño. Los personajes toman posiciones alrededor de mi cama. Grandes lienzos cubren las paredes. El decorado consta de: un cielo sucio, lejano y un parque en cuyo centro se exhibe La Esfinge. El tocado de plumas subraya su importancia. Las líneas de fuga escapan hacia un punto oculto pero existente: su corazón. Ella mira al infinito. Es una pose, probablemente esté ciega. Se diría que detenta el poder, pero solo es un icono
Y de madrugada llega el sueño. Los personajes toman posiciones alrededor de mi cama. Grandes lienzos cubren las paredes. El decorado consta de: un cielo sucio, lejano y un parque en cuyo centro se exhibe La Esfinge. El tocado de plumas subraya su importancia. Las líneas de fuga escapan hacia un punto oculto pero existente: su corazón. Ella mira al infinito. Es una pose, probablemente esté ciega. Se diría que detenta el poder, pero solo es un icono