Sudáfrica 2010: desde méxico, la previa

Por Gustavo Torres de Futbolísticamente Incorrecto

Qué cosas de la vida. Yo, un humilde bloggero de Sonora, México, que radica en Sinaloa, escribiendo de lo que más me place en dos de los mejores sitios argentinos de fútbol. El destino nos ha hecho encontrarnos a ambos países, México y Argentina. Dentro de lo poco que conozco a su país he sacado muchas conclusiones que son dignas de análisis y revisión.
Lo primero es que tanto México como Argentina se paran con un 4-3-3. Sin embargo, los medios de Maradona son de mayor proyección ofensiva. Digamos que Verón es Márquez, pero Márquez es un contención y Verón un mediocampista retrasado encargado de regular la actividad de su equipo. Mascherano y Torrado son recuperadores de balón natos, aunque el primero lo hace de mejor manera que el segundo. Efraín Juárez es un volante mixto de mucho recorrido, mientras que Di María solamente aporta al ataque y no ha tenido un mundial para destacar, realmente.
En la defensa, México cuenta con dos bastiones atrás: Moreno y Rodríguez. A Moreno se le dio el espacio debido al adelantamiento en el dibujo de Aguirre a Márquez y Rodríguez, el "Maza", ha progresado enormidades desde que llegó al fútbol holandés. No nos cansamos de elogiarlo sarcásticamente y menuda y grata sorpresa que nos ha ofrecido. Salcido es incansable por la parcela izquierda y parece que ha regresado a ser aquel defensa que La Volpe erigió a la selección. En la defensa es un perro de cacería y al ataque sube generando peligro, pese a que no ha conseguido perforar cordeles enemigos. Ricardo Osorio es la antítesis de Salcido: lento, mayor proyección defensiva y escaso ascenso por el costado. Se encargará de Tévez y Di María, incluso hasta de Messi, ya que es un jugador volátil en 3/4 de cancha.
Giovani dos Santos es encarador, le encanta la gambeta y recortar en diagonal hacia al centro. En veces llega a ser predecible, pero cuando se enchufa es un hombre capaz de provocar bastante daño, aunque es intermitente e irregular, por ende. En la mediapunta izquierda rondan tres nombres: Guardado, Vela y Barrera. Guardado surgió como carrilero, con Hugo subió a mediocampista y con Aguirre lo ha hecho de interior, siempre por el mismo lado. Vela, cuando se conjunta con Giovani, es explosivo, también le falta consistencia. Barrera es un revulsivo que aporta más cosas en los segundos tiempos y cuya posición natural es la que desempeña Giovani, así que queda prácticamente descartado.
Adelante está la duda existencial de sembrar a Franco o a Hernández. Franco no ha anotado ningún gol en Mundiales y "Chicharito" logró uno que gracias a él está la selección en estas instancias. Guille, curiosamente argentino de nacimiento, trabaja mejor como poste, atrayendo marcas y bajando balones, un segundo delantero. Lamentablemente Aguirre peca de necio y confía en él como delantero punta por encima de Hernández, campeón de goleo en el Bicentenario 2010 y máximo goleador mexicano en la etapa premundialista. Hernández es más rápido que Franco, se bota y distribuye hacia las bandas, tiene un gran cabeceo y al parecer la presión no se lo ha comido, lo demostró ante Francia.
El punto más débil de Argentina es la defensa son lentos, no obstante, son elementos de mucho oficio. El más flojo de esta pareja es el que milita en la , no queda dudas. Maradona, en un principio, había apostado por cuatro marcadores centrales, cuya cantidad fue reducida a tres, habilitando a Heinze en la banda izquierda. Samuel y DemichelisBundesliga. La región que más problemas padece la albiceleste es en la lateral derecha. Han puesto a Burdisso y a JonásGutiérrez, a pesar de que éste último es un volante por izquierda natural y que ha sido sumamente criticado por prensa y afición del país sudamericano.
Verón, con todo y la losa de años que carga, es el motor de Argentina, el regulador, como lo mencioné con anterioridad. Trazos largos y finos, distribución de juego, amplitud y visión de campo. Di María aún está verde, tendrá que graduarse frente a México y convencer al Benfica de que lo suelte. Messi es de otro planeta, indudablemente. Más animado a disparar de larga distancia, con un dominio exquisito de la pelota y una mejoría tremenda en los últimos tiempos, es el jugador del momento junto con Milito en el cuadro dirigido por Maradona. Tévez es un roedor, más de sacrificio, rápido, a veces desbalanceado y sin estar en la misma sintonía que Lionel.
Higuaín es el centro delantero de la preferencia de Diego, el hattrick frente a Corea del Sur lo convenció. Milito tendrá que comer banquillo. Higuaín fue el delantero más contundente de la liga española en su última edición, las estadísticas lo comprueban. No obstante, se le critica que en momentos decisivos se "arruga", es decir, se achica, erra goles cantados, su edad lo traiciona.
Argentina domina en las papeletas para ganar este partido, si México quiere lograr la sorpresa tendrá que dominar la posesión de la pelota y causar jaquecas a la zaga con la agilidad de sus mediapuntas. Jugar defensivamente es practicar un harakiri, auténticamente. La actuación de Efraín Juárez será trascendental por el lado mexicano, ya que asistirá a Osorio por el lado derecho y también tiene que llevar la pelota a los ejes de ataque. En el otro lado de la moneda todavía no se consigue un funcionamiento colectivo óptimo, sin embargo, las individualidades al final pueden pesar. ¿Hombre a marcar? Messi, pero también Tévez es de cuidado, no deben de perderlo de vista. Habrá que realizar una marcación personal, sobre todo en el caso de Márquez, quien se encargó de frenar a Forlán y a Ribéry en la fase de grupos.
Es todo, amigos, muchas gracias por la invitación y espero les haya gustado mi análisis.