Suicida enamorada de la vida

Sinopsis Sinopsis

Nerea se pasea nerviosa y borracha por la azotea del emblemático edificio de Torres Blancas. Es el Madrid de 1984, en los tiempos de la muy denostada y nunca bien ponderada "movida madrileña". Mientras espera el mejor momento para precipitarse al vacío, intenta buscar la motivación y fuerzas necesarias que le ayuden a hacerlo. Desilusión, desesperación, desencanto... ¿hay algo que le impida hacerlo? ¿existe alguna razón por la que NO debería saltar? Andrea Feldman lo hizo antes que ella y tuvo sus cinco minutitos de gloria que, como su buen amigo Warhol afirmaba, es lo que todos buscamos y necesitamos. KK, su amiga del alma y de fechorías, preocupada por su desaparición, la busca desesperadamente por los lugares que solían frecuentar cuando todavía se lo pasaban bien juntas.
Suicida enamorada de la vida es en realidad una alegoría, el rise & fall de la "movida madrileña": entre todos la mataron y ella sola se murió. Pero en versión tragicómica y con una banda sonora del trece. Porque la música lo intensifica todo. Y en los años 80, de forma muy especial.

Mi opinión

Reseña 114. Hoy voy a hacer la reseña de una novela corta que se lee en un suspiro. Yo la he leído durante el trayecto en el autobús al trabajo, la primera mitad a la ida y la segunda mitad a la vuelta. Pensad que no llega a las cien páginas.

Nerea Larrubia, su musical autora, ya nos presenta a la protagonista que se llama Nerea tal si fuese una autobiografía de la autora o su álter ego en un momento decisivo en su vida. El título ya nos da una buena pista de su estado de ánimo.

A lo largo de cien páginas vamos conociendo a Nerea y lo que le ha llevado a estar en la azotea de las Torres Blancas por la noche. Nerea es una chica que se divierte, fruto de la archiconocida Movida Madrileña. ¿Quién no ha oído hablar de los 80′ y la Movida o incluso la ha vivido?

Esta novela nos transporta a aquella época con un lenguaje moderno y unos toques musicales al inicio de cada capítulo e intercalados en la trama en forma de extractos de canciones de Radio Futura, David Bowie, Mecano, Bauhaus...

Además de Nerea tenemos a su amiga, KK, la persona con la que se va juerga todas las noches y que es la persona que mejor la conoce. KK es un buen personaje, me ha gustado su forma de ser. Mientras que Nerea la he visto en exceso victimista llegando un momento en que me sentí más interesada por lo que le pasaba a KK que sobre los pensamientos autodestructores de Nerea.

Una novela amena, apta especialmente para nostálgicos de los 80′. En la misma podéis encontrar emblemáticos escenarios relacionados con la Movida que os transportaran en el tiempo a la vez que podéis sentir cierta empatía por sus personajes. Me quedo en especial con el tramo final, el último capítulo está muy logrado. Por otro lado, he encontrado la novela excesivamente corta, me hubiese gustado conocer con mayor profundidad algunos de los personajes.

Aplaudo el estilo de su autora, ágil y divertido. Ah, antes la he calificado como musical autora. Nerea Larrubia tiene un sello discográfico y es promotora de conciertos.