Hoy conocemos un estudio desarrollado por investigadores del Hospital Pediátrico de Investigación St. Jude (Estados Unidos), en el que se concluye que los pacientes que superan un cáncer infantil, tienen mayor riesgo de sufrir problemas de salud en edad adulta. En esta investigación se analizaron los datos de 14.359 personas adultas que sobrevivieron a diferentes tipos de cáncer infantil, pertenecientes a 26 centros médicos estadounidenses y canadienses.
Superar un cáncer infantil aumenta el riesgo de sufrir diferentes enfermedades a partir de los 35 años de edad, un nuevo cáncer, enfermedades del corazón y otras patologías que afectan a los riñones, a los pulmones, al hígado, etc. Los expertos compararon la vida sanitaria de quienes habían padecido cáncer y sus hermanos sanos, encontraron una clara diferencia en la calidad de la salud, teniendo hasta cinco veces más probabilidades de sufrir una enfermedad quienes habían recibido un tratamiento oncológico.
Los investigadores explican que existe una progresión, en los adultos con edades comprendidas entre los 20 y los 34 años de edad, el riesgo de sufrir una enfermedad como las mencionadas era de 3’8 veces más que en sus hermanos sanos (participaron 4.301 hermanos), a partir de los 35 años este riesgo se incrementaba a cinco veces, por lo que es fácil deducir que a más edad, mayor será la probabilidad de padecer un problema de salud grave. Según los análisis realizados, a los 50 años de edad, más del 50% de los supervivientes de un cáncer infantil habían experimentado algún problema de salud serio, en los hermanos sanos el porcentaje alcanzaba el 20%.
Un 22% de los que sobrevivieron al cáncer infantil tenía al menos dos problemas graves de salud y un 10% tenía tres o más enfermedades que afectaban a los pulmones, al hígado, al corazón, un problema hormonal, etc. Se puede decir que son muchas las secuelas que perduran en el tiempo tras superar un cáncer en la infancia, recordemos que no hace mucho hablábamos de las secuelas psicológicas tras superar la enfermedad.
Con respecto al mayor riesgo de sufrir enfermedades del corazón, es interesante recordar que una investigación desarrollada por expertos de la Universidad de Minnesota (Estados Unidos), determinaba que los fármacos contra el cáncer infantil podían provocar enfermedades cardíacas, por lo que se podría deducir que estos fármacos también afectarían a otros órganos vitales como los indicados.
Parece ser que los 35 años de edad es un punto de partida, los expertos explican que quienes habían alcanzado esta edad sin haber sufrido ningún problema de salud, en la próxima década un 25’9% terminaba padeciendo al menos una enfermedad grave. En cambio, el porcentaje se reducía al 6% en los hermanos sanos. Dados los riesgos de los supervivientes, se aconseja que se preste especial atención a la salud de éstos en toda su vida, dependiendo del tipo de cáncer superado, se recomienda que se realicen diferentes exploraciones y revisiones a una edad más temprana de lo que se recomienda para el resto de la población.
La tasa de supervivencia frente a esta enfermedad es elevada, sin embargo, el riesgo de sufrir otras enfermedades es también más elevado, teniendo en cuenta el estudio antes citado en el que se destacan más riesgos de sufrir enfermedades del corazón a causa del tratamiento oncológico, quizá sería interesante desarrollar una línea de investigación para relacionar los tratamientos oncológicos con las diferentes enfermedades que se sufren a posteriori. Podéis conocer todos los detalles de la investigación a través de este artículo publicado en la revista del Hospital Pediátrico de Investigación St. Jude.
Foto | Ramona Heim
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Superar un cáncer infantil aumenta el riesgo de sufrir enfermedades en edad adulta