Astrónomos han sido testigos de una explosión cósmica alrededor de 200 veces más potente que una supernova típica -eventos que ya se clasifican entre los estallidos más poderosos del universo- y más de dos veces más luminosa que el anterior récord de una supernova.
En su momento de mayor intensidad, la explosión -llamada ASASSN-15lh- brilló con 570.000 millones de veces la luminosidad del Sol. Si esa estadística no impresiona, hay que tener en cuenta que este nivel de luminosidad es aproximadamente 20 veces toda la producción de los 100.000 millones de estrellas que comprenden nuestra galaxia, la Vía Láctea.
La explosión sin precedentes se piensa que es un ejemplo importante de una “supernova superluminosa“, una recientemente descubierta sumamente rara variedad de explosión desatada por ciertas estrellas cuando mueren. Sin embargo, los científicos están francamente perdidos con respecto a qué tipo de estrellas y escenarios estelares podrían ser responsables de estas extremas supernovas.
Como se describe en un nuevo estudio publicado este jueves en ‘Science’, ASASSN-15lh está entre las supernovas superluminosa más cercanas jamás vista, en torno a 3.800 millones de años luz de distancia. Dado su extraordinario brillo y cercanía, ASASSN-15lh podría ofrecer pistas clave a la hora de descubrir los secretos de esta clase desconcertante de detonaciones celestes.
“ASASSN-15lh es la supernova más potente descubierta en la historia humana“, afirma el autor principal del estudio Subo Dong, astrónomo y profesor investigador en el Instituto Kavli de Astronomía y Astrofísica (KIAA, por sus siglas en inglés) en la Universidad de Pekín, China. “El mecanismo y la fuente de energía de la explosión siguen siendo un misterio porque todas las teorías conocidas encuentran graves desafíos para explicar la inmensa cantidad de energía que ASASSN-15lh ha irradiado”, añade.
ASASSN-15lh se vislumbró por primera vez en junio 2015 por los telescopios gemelos con lentes de diámetro de 14 centímetros en el Cerro Tololo, en Chile. “ASAS-SN es el primer proyecto astronómico en la historia para escanear con frecuencia todo el cielo óptico para los transeúntes ópticos”, explica Krzysztof Stanek, profesor de Astronomía en la Universidad Estatal de Ohio y co-investigador principal de ASAS-SN. “Cada vez que en la ciencia nos abre un nuevo espacio de descubrimiento, deben seguirse los emocionantes hallazgos. El truco es no perderlos”, agrega.