Hala, haaaaaalaaaaa, ¡¡¡so exagerada!!!
Bueno vale...pero 5 arriba, 5 abajo, por ahí andarán las cuentas.
¿Qué queréis? ¿quedar bien con la suegra? Haced esta tarta. ¿Que queréis? ¿demostrar a mamá que no hay nada que se resista a vuestras varillas reposteras? Haced esta tarta. ¿Qué pasa? ¿Os viene a comer "ese familiar" tocapelotas que a todo le tiene que poner un punto y una coma? Haced esta tarta, que ya le tapáis la boca por los siglos de los siglos...y amén.
Y es que oye, combinar la ligera acidez del queso fresco batido con el dulzor del melocotón es algo realmente espectacular. Y si no me creéis, probad a prepararla...
Dificultad: para los que ya han preparado alguna que otra tarta: súper fácil. Para los que todavía andan inseguros sobre el significado de la palabra espátula: la cosa ya es un poco más complicada...
Tiempo de preparación aproximado: de las que se hacen de un día para otro.
Raciones: 12-16
Molde: desmoldable de 23cm. + molde un poco más grande (de unos 27cm.) para hacer el bizcocho de la base.
INGREDIENTES
Para el bizcocho de la base:
- 3 huevos a temperatura ambiente
- 60g. de azúcar
- 60g. de harina de repostería
- 500g. de queso Quark fresco batido 0% materia grasa (lo venden en tarrina con el nombre "queso fresco batido", no tiene pérdida)
- 180g. de azúcar
- 4 yemas
- ralladura de un limón
- 7 hojas de gelatina neutra de unos 2g. cada una
- 500ml. de nata para montar
- 250ml. de leche
- 4 mitades de melocotón en almíbar
- 1 pizca de sal
- 5 galletas María
Del bizcocho para la base:
- Para hacer el bizcocho necesitaremos un molde un poco más grande que el tamaño del desmoldable en el que vayamos a hacer la tarta. Si mi molde para tartas es de 23cm. yo utilizo uno de 27cm. para hacer el bizcocho.
- Precalentamos el horno a 180º, posición "arriba y abajo".
- Separamos las claras de las yemas.
- Con las varillas eléctricas batimos las yemas con el azúcar unos 3 minutos, hasta que veamos que la mezcla blanquea.
- Con un tamiz o un colador le añadimos la harina y mezclamos suavemente con la espátula. (Como ya sabéis, incorporamos la harina con el tamiz o colador para evitar que se formen grumos.)
- Montamos las claras a punto de nieve y, para que no se nos bajen, las mezclamos con delicadeza con la mezcla anterior.
- Engrasamos el molde con un poco de aceite o mantequilla y vertemos la masa.
- Horneamos unos 20 minutos en el nivel medio del horno. Cuando veáis que empieza a dorarse es que está listo.
- Esta base de bizcocho no queda super esponjosa como un bizcocho "normal", queda más elástica y está realmente deliciosa, ya que tiene un sabor muy neutro que no interfiere con los sabores principales de la tarta.
- Una vez horneado dejamos que se enfríe por completo en el mismo molde o sobre una rejilla.
- Cuando se haya enfriado y con la ayuda de la base del molde desmoldable, recortamos el bizcocho justamente a la medida del molde, colocamos bien y cerramos.
- Rallamos un limón y reservamos la ralladura.
- Ponemos a escurrir las mitades de melocotón en almíbar.
- Ponemos en un plato hondo con agua fría las hojas de gelatina para que se hidraten (con un par de minutos es suficiente).
- En un cazo ponemos a calentar a fuego medio la leche, el azúcar, la pizca de sal y la ralladura de limón. Cuando empiece a hervir retiramos del fuego, escurrimos las hojas de gelatina y las añadimos. Mezclamos bien con una varilla de mano, hasta que la gelatina se haya disuelto completamente.
- Separamos las claras de las yemas. Añadimos las yemas al contenido del cazo y removemos de nuevo con la varilla de mano hasta que quede todo bien mezclado.
- Volcamos esta mezcla en un bol grade y añadimos la crema de queso. Mezclamos bien con la varilla.
- Montamos la nata y la añadimos a la mezcla anterior.
- Cortamos las mitades de melocotón a trocitos pequeños y reservamos.
- Vertemos sobre el bizcocho, que ya tenemos colocado en la base del molde, un poco de crema hasta que cubra la base del bizcocho.
- A continuación, anadimos bien repartidos un puñado de trocitos de melocotón.
- Volvemos a añadir crema y otra vez echamos unos cuantos trocitos de melocotón, y así sucesivamente hasta acabar con una capa de crema.
- Dejamos que cuaje en la nevera de un día para otro.
- Al día siguiente ponemos en la picadora las galletas y las picamos hasta que queden convertidas en polvo. Con la ayuda de un colador, espolvoreamos las galletas como cobertura.
- Desmoldamos la tarta y ñam, ñam...