Tarta de manzana y butifarra de perol

Una tarta de manzana de primer plato, el sueño de los golosos. Pero también hemos pensado en los salados. Inspirada en la receta de las manzanas rellenas de carne, esta tarta la vimos hace un montón de tiempo en la tele, hecha por el mismísimo Joan Roca, con unos cuantos añitos menos, tanto él como nosotras.

 Ingredientes (para 4 personas)

• 1 butifarra de perol de 250 gr. aprox.
• 2 manzanas Royal Gala 
• 1 lámina de hojaldre (nosotras de Lidl)
• 1 huevo
• 1 bolsa de lechugas variadas
• 1 manojito de cebollino
• 3 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
• 1 cucharada sopera de aceto balsámico de Módena
• sal Máldon
• pimienta
• un pellizco de canela molida

Para empezar quitáis la piel a la butifarra y la picáis con un cuchillo en trocitos pequeños. Reserváis.
Peláis las manzanas, les quitáis el corazón, las partís por la mitad. Cada mitad la cortáis en láminas procurando que os queden en bloque y así os será más fácil colocarlas sobre las tartas.
Desenrolláis la lámina de hojaldre y cortáis 4 rectángulos de 12x18 cm.
Ahora preparáis una bandeja de horno con papel sulfurizado y colocáis los rectángulos de hojaldre. Pincháis la masa con un tenedor para que al hornear no suba mucho. Después, con un cuchillo afilado marcáis un rectángulo en el interior, con cuidado de no llegar a cortarla completamente (esto es para que luego quede un borde alrededor). 
Sobre los rectángulo que habéis marcado en la masa de hojaldre extendéis los trocitos de butifarra.
Ahora cogéis media manzana laminada y con la palma de la mano moviéndola un poco hacia delante y hacia atrás, la extendéis. Veréis que os queda bastante colocadita. Con un cuchillo ancho a modo de pala la trasladáis y la depositáis encima de los trozos de butifarra de uno de los rectángulos de hojaldre, cubriéndola.  Repetís la operación con los restantes.

Pinceláis los bordes con huevo batido.
Precalentáis el horno a 200º.  Metéis las tartas en el horno y las dejáis 15 minutos, vigilando. Si veis que los bordes se están dorando demasiado, cubrís con un papel de plata hasta que sea el momento de sacarlo del horno.

Preparáis la vinagreta de la siguiente manera: en un bol mezcláis el aceto balsámico de Módena con el aceite, con un tenedor lo batís para que emulsione. Reserváis.
Cuando las tartas estén horneadas salpimentáis la manzana, espolvoreáis un pellizco de canela por encima de cada tarta y echáis un poco de cebollino picado.
Rociáis las láminas de manzana con un hilillo de vinagreta y el resto lo utilizáis para aliñar las lechugas que acompañan las tartas.
Os quedaréis con todo el mundo con esta receta!