Esta receta es de “Pepa”, una compañera de un grupito que tenemos en Facebook de amigas aficionadas a la cocina. Solemos colgar nuestras recetas y nos copiamos, unas a otras, las que más nos gustan. Esta tarta me gustó desde el primer momento porque es muy facilita y refrescante y no hay que usar horno que, con estos calores, viene muy bien.
Yo le he hecho un pequeño cambio: Pepa usa crema pastelera casera y yo la he sustituído por una crema hecha con un paquete de Flanín “El Niño”, ha quedado riquísima, jugosa y refrescante. Os la recomiendo 100%.
Gracias Pepa!
Ingredientes:
1 paquete de sobaos pequeños (de los de 36 unidades)
1 lata de piña en rodajas en su jugo (de 820 grs.)
Para la crema:
1 sobrecito de Flanín “El Niño”
4 cucharadas soperas de azúcar avainillada
330 c.c. de leche
Para cubrir la tarta:
500 c.c. de nata de montar
70 grs. de azúcar
Instrucciones:
Utilizaremos un molde rectangular ó cuadrado.
Preparamos la crema según las intrucciones del paquete, reservamos para que vaya templando.
Hacemos un puré con la piña y reservamos su jugo para emborrachar los sobaos. Yo he reservado una rodaja de piña para la decoración final.
Forramos el molde con papel film dejando sobrante a los lados.
Cubrimos el fondo del molde con sobaos bien pegaditos uno junto a otro.
Emborrachamos con el jugo de piña ayudándonos de una brochita.
Extendemos encima todo el puré de piña.
Ponemos otra capa de sobaos y volvemos a emborracharlos.
A continuación una capa de crema pastelera ó de flan.
Por último otra capa de sobaos y los emborrachamos.
Tapamos con el film y presionamos un poco para que tome la forma del molde.
Guardamos en el frigo hasta el día siguiente.
Si el molde es más pequeño podemos utilizar los sobaos enteros, el mío era grandecito y tuve que cortar algunos sobaos en dos rebanadas.
Al día siguiente montamos la nata con el azúcar, desmoldamos la tarta y decoramos con la nata (no tengo mucha soltura con la manga pastelera, así que la he adornado con un tenedor) y trocitos de piña.
Deliciosa!