Vamos con los ingredientes:
- 20gr. de Nueces.
- 20gr. de Almendras.
- 50gr. de Avena.
- Leche desnatada o soja.
- 500ml. Queso fresco batido 0%.
- 6 colas de gelatina neutra.
- 30gr. proteína de fresa.
- Edulcorante liquido.
La preparación:
- Para la base machacamos los frutos secos y la avena, le añadimos un chorrito de leche y unas gotas de edulcorante, para que compacte y ponemos la mezcla en el fondo del molde, lo metemos en el micro unos segundos para calentar la mezcla y que quede bien compacta.
- El queso batido, lo echamos en un bol grande y lo calentamos en el micro para que quede mas liquido y sea más fácil de remover. Las colas de gelatina las hidratamos y una vez calentado el queso vamos removiendo y añadiendo la gelatina para que quede bien disuelta en la mezcla, echamos los 30gr. de proteina (yo use proteina de frutas del bosque de StarPro) y edulcorante al gusto. Una vez este todo bien disuelto, lo echamos en el molde encima de la base.
Ya esta, así de sencillo, dejamos enfriar en el frigorífico mínimo unas dos horas y lista para comer. Es una tarta con una textura muy agradable tipo mouse, no como otras tartas proteicas tipo bizcocho que salen un poco secas (ya me aventurare a poner otra receta de tarta).
Como veréis en la foto yo le añadí una vez que estaba el queso frío, gelatina de fresa por encima y quedo espectacular, sino fuera porque la había echo yo, no pensaría que era una rica tarta de proteínas.
Aprovecho para darle las gracias a Marisa Freedom por su grupo de recetas en Facebook.