Tarta Gertrudis

Para el cumpleaños de mi sobrina la chiquinina que cumplió un año meses atrás, el primer año de su larga vida, y quise hacer esta tarta. Claro, ella no se entera de nada pero su hermana que tiene cuatro años  estaba super ilusionada por el cumpleaños de su hermana así que quise hacer esta tarta un poco para que disfrutase de lo lindo ella también. Es una tarta que no tiene mucho trabajo pues los brazos de gitano (que obviamente se pueden hacer en casa) son comprados con lo cual la mitad del trabajo queda hecho. Tartas Gertrudis hay muchas y leyendo y releyendo de unas y otras cogí lo que más me gustó de cada una y luego yo, le di mi toque personal para que no fuese como las demás. La mousse es la de la tarta balón de fútbol que queda firme y es muy rica. Tuvo un éxito rotundo y no sobró nada de nada, ni gota, ni miga. Preciosa y simpática no? Juzgad vosotros mismos.

Como estábamos en un local optamos por los tan socorridos platos de plástico, así que el glamour de la vajilla, cero.

*La ensaladera que utilicé es de 28cm, la de duralex de toda la vida

*Sale una tarta familiar para más de diez personas

*Cuando compremos los bracitos de gitano los meteremos en la nevera con el fin de que al cortarlos estén firmes y no se rompan.

*Los lápices de chocolate son muy buenos para decorar pues hacen de lápiz y no hay que estar derritiendo el chocolate y metiéndolo en manga pastelera ni nada. son tubitos y vienen tres, chocolate blanco, chocolate negro y chocolate con leche. No hay que tenerlos en la nevera para que no estén duros y podamos pintar con ellos.

INGREDIENTES

-tres bracitos de gitano rellenos de nata sin cobertura de chocolate

-un brik de 500ml de nata para montar 35% materia grasa

-una tableta de chocolate fondan (250g)

-100g de leche +50g para hidratar la gelatina

-un sobre de gelatina en polvo

-tres claras de huevo

-50g de azúcar (25 y 25)  

PREPARACIÓN

Lo primero forramos la ensaladera bien con film transparente. Le puse dos capas en forma de cruz para que cubriese bien toda la superficie. Cortamos sobre la tabla de madera dos de los bracitos de gitano que teníamos en la nevera para que estuviesen duritos en rodajas finas y vamos cubriendo la ensaladera desde el centro en el fondo hacia arriba cuhasta que esté toda forrada. Si es necesario dando que las rodajas estén en la misma postura y cortamos alguna rodaja por la mitad para cubrir los bordes arriba del todo. Reservamos.

Derretimos el chocolate al baño maría en un cazo dentro de otro y lo reservamos.

En un vaso ponemos 50g de leche fría y echamos el sobre de gelatina en polvo para que se vaya hidratando. Calentamos el resto de la leche, o sea, los 100g y cuando esté caliente echamos la gelatina hidratada y movemos todo bien. Añadimos el chocolate, movemos hasta que esté todo bien integrado y dejamos templar.

Por otro lado, montamos las claras a punto de nieve bien firme con las varillas eléctricas o en la amasadora. Cuando estén montadas añadimos 25g de azúcar. Las ponemos en un plato hondo y las reservamos en la nevera. Ahora montamos la nata y cuando empiece a estar firme echamos los otros 25g de azúcar. Ponemos el chocolate en un cuenco amplio y echamos una cucharada de nata montada e integramos bien. El cuenco ha de ser grande pues va a ir aumentando de volumen la mezcla.

Hay que recordar que siempre se ha de echar la nata sobre el chocolate y no al revés. Ahora echamos otras dos y movemos con cuidado para que no se baje. Echamos el resto de nata moviendo con cuidado y con movimientos envolventes. Esta será la mezcla resultante.

Fijaos como ha aumentado de volumen la mousse, y aún tenemos que poner las claras montadas a punto de nieve. Las sacamos de la nevera y las incorporamos a la mezcla despacio, con cuidado, mezclando bien con la varilla de mano.

Y la mousse es esta, una buena cantidad, de ahí que el cuenco debe de ser grande.

Esta mousse la ponemos en la ensaladera que teníamos forrada de bracito de gitano y la alisamos un poco con un cuchillo mismo o con una lengua de silicona.

sobrará un poco que aprovecharemos para tomárnosla de postre, mirad, esta que sobró para mi de postre, estaba riquísima.

Tapamos con las lonchas finas de brazo de gitano cuidando de que los huecos queden bien tapados, pues esta será la base de la tarta. Tapamos con film transparente y  metemos la ensaladera en la nevera hasta el día siguiente.

Al día siguiente, sacamos de la nevera la ensaladera y la volcamos sobre la base donde presentaremos la tarta. Es un poco grande por lo que no sirve cualquier fuente. Yo utilicé como base un cartón grande de una caja forrada de papel para horno. Y más o menos en el centro coloqué la tarta.

Ahora la vamos a  decorar. Esto es ya un poco cuestión de gustos. Yo elegí estos bizcochitos porque me recuerdan a los bonis de toda la vida, os acordáis de los bonis?

Cortamos los bizcochos algo menos de la mitad y colocamos a modo de patas. cortamos uno un poco más largo para la cabeza y hacemos una hendidura que será la boca y para la cola cortaremos un trocito en triángulo. Con el lápiz de chocolate con leche (es un tubito) pintamos las uñas de las patas y le damos un poco en el lado que da al cuerpo de la tarta para que se pegue. Ahora hacemos los ojos con el tubito de chocolate blanco y le hacemos la pupila con el de chocolate negro. Por último, metemos una gominola aplastada de color rosa para la lengua en la hendidura de la boca. Por último decoramos la base de la tarta a nuestro gusto. En este caso hice unas flores emulando al suelo de un jardín.

Mirad el detalle de la cara, no es fantástico? me encanta, si hasta pareciera que tiene pestañas!

Espero que os haya gustado el paso a paso.