Si hay un corrector en el mundo beauty que ha sido y sigue siendo el favorito de muchas, ese es el Shape Tape Concealer de Tarte.
Así que, me parece que este nuevo lanzamiento puede convertirse también en un producto viral por su versatilidad y porque en el mercado común, más allá de las marcas y tiendas profesionales, no es habitual ver precorrectores de estos tonos:
Shape Tape Corrector- Negro: para dar profundidad o contorno al rostro.
- Rojo: para corregir ojeras en pieles oscuras.
- Naranja: para corregir las ojeras en pieles de tonalidad media.
- Melocotón: para la corrección de ojeras en pieles de tonalidad entre clara y media.
- Azul: neutraliza y difumina decoloraciones anaranjadas o amarillentas en el rostro.
- Verde: para neutralizar rojeces, manchas y zonas hiperpigmentadas.
- Rosa: aporta luminosidad a manchitas oscuras.
- Amarillo: para iluminar zonas apagadas o rojeces no muy intensas.
- Blanco: se puede usar como base para aportar luminosidad o bien para personalizar nuestro tono mezclando con otro concealer.
La teoría del color es igual de interesante que compleja y con matices. Seguro que una persona con conocimiento en la colorimetría puede sacar mucho partido a los diferentes tonos. La verdad es que no es mi caso, yo solo he utilizado precorrectores asalmonados y verdes. Pero sí es cierto que cuando he visto tutoriales, la diferencia es increíble cuando este tipo de productos se usan apropiadamente.
¡Vamos a ver qué más características tienen!
Contienen ácido hialurónico, mango, manteca de karité, ginseng, arcilla del Amazonas, higo chumbo, escualano, raíz de regaliz… Casi parece un tratamiento en vez de maquillaje.
La textura es cremosa con acabado de cobertura total y de alta duración. La marca promete que se difumina maravillosamente, que combina con el Shape Tape Concealer y que no se forma pliegues.
No sé si podríamos pedir más señoras.